Este miércoles Rafael Garay abandonó la cárcel Capitán Yaber y quedó en libertad condicional, después de que la Corte Suprema acogiera un recurso de amparo a su favor.
El empresario había sido condenado el 18 de octubre de 2018 a siete años de presidio y al pago de una multa de 21 UTM por el delito de estafas reiteradas a 29 personas, con un perjuicio cercano a los 1.300 millones de pesos.
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Según los magistrados, el informe psicosocial de Gendarmería “no refiere antecedentes categóricos que orienten sobre factores de riesgo de reincidencia del amparado, que impidan reconocer su posibilidad de reinsertarse a la sociedad al momento de postular a la libertad condicional, conforme expresa el Decreto Ley N° 321″. Por lo tanto, “se cumplen los requisitos exigidos”.
Garay dejó la cárcel tras cumplir la mitad de su condena, a la que se le abonó el año que estuvo en prisión preventiva. Así, el ingeniero comercial deberá efectuar el trámite de firma semanal.
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Esta semana, Marlene de la Fuente, una de las víctimas de Garay, había reprobado la determinación de la Corte Suprema, acusando: “Me siento tremendamente vulnerable, aún más en las condiciones que me encuentro ahora, sola, con mis cuatro niños. Durante el proceso, cuando el imputado iba a ser condenado, recibí reiteradas amenazas telefónicas de distintos números”.
“Me señalaban que mis niños y yo seríamos golpeados y tendríamos un accidente si continuábamos con el juicio”, reveló a CHV Noticias.
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