ARCHIVO: AGENCIA UNO

La Tercera Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago determinó dejar en prisión preventiva al exministro, Juan Antonio Poblete y al exdirector de Inteligencia del Ejército, Schafik Nazal por considerar que la libertad de ambos “constituye un peligro para la seguridad de la sociedad“.

De esta manera, se confirmó la resolución de alzada dictada el 3 de mayo pasado por el 7° Juzgado de Garantía de Santiago.

Cabe recordar que el pasado miércoles, Poblete y Nazal fueron formalizados por 19 delitos en el marco de la investigación por escuchas telefónicas.

En concreto, ambos fueron formalizados por 12 delitos de intercepción indebida y 7 por falsificación de instrumento público. Tras la audiencia, el 7° Juzgado de Garantía decretó la prisión preventiva tanto para el exministro de la Corte de Apelaciones y el exdirector de Inteligencia del Ejército.

El exjuez tardó 40 minutos en conectarse y lo hizo luego de que la Fiscalía solicitara una orden de aprehensión en su contra, ya que aseguran temer por la fuga de quien no acudió a declarar en seis citaciones, no entregó su teléfono y dio una dirección del Poder Judicial como su domicilio.

En la audiencia, el fiscal de Alta Complejidad, Jaime Retamal, expuso que “ambos imputados burlaron dolosamente las exigencias legales, confeccionándose una apariencia de autorización legal, sin otorgarse la debida autorización judicial.

Esto, según el persecutor, se hizo a través de pequeños oficios que eran elaborados por Nazal y firmados por Poblete. En ellos se habrían utilizado nombres falsos para ocultar las verdaderas identidades de sujetos de interés, entre ellos, el capitán del Ejército, Rafael Harvey y el periodista, Mauricio Weibel.

“Se trata de delitos que se ejecutan concertadamente y donde claramente los dos sabían. El señor Poblete en vez de cumplir con su función jurisdiccional, se prestó para servir de instrumento”, acusó en la instancia María Inés Horvitz, abogada del Consejo de Defensa del Estado (CDE).

Otro de los casos, fue el del exoficial Carlos Farías, a quien se le atribuyeron cinco números telefónicos en la solicitud de inteligencia, aunque solo uno era usado por él. En enero de 2018, ad portas del término de su cargo, Nazal pidió cesar las intervenciones usando nombres falsos de dos ciudadanas bolivianas.

¿Qué dijeron las defensas?

El ministro le dice la forma en que debe hacerse, más allá de todas las infracciones de forma, la naturaleza de una resolución, era salvaguardar los nombres de las personas que se estaban investigando”, aseguró el abogado de Nazal, Mario Vargas.

En tanto, el abogado del exministro del tribunal de alzada, Andrés Rojas, planteó que “es fácil excusarse con Poblete, más si los nombres de las personas bolivianas que se le daban al ministro eran reales y si era el propio señor Nazal quien tenía la información verdadera“.

Cabe mencionar que los oficios originales, documentación secreta, armas, decenas de teléfonos y bolsas con chips fueron incautados del domicilio de Poblete, quien según reveló Ciper, fue nombrado reservista del Ejército en medio de los pinchazos telefónicos.

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