Agencia Uno

El Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones anunció este martes el inicio de un plan de desplazamiento a nivel nacional de cara al plebiscito de salida de nueva Constitución que se realizará el próximo 4 de septiembre.

“A cuatro meses del plebiscito, desde el ministerio estamos trabajando en un plan a nivel nacional para asegurar que todos los ciudadanos y ciudadanas puedan desplazarse hasta sus locales de votación para ejercer su derecho a voto en esta jornada tan importante”, señaló el subsecretario de Transportes, Cristóbal Pineda.

La autoridad detalló que en la última elección votaron 8,2 millones de personas a nivel nacional, pero, con el voto obligatorio, “los potenciales electores superarán los 15 millones en el plebiscito, lo que implicará una mayor demanda por transporte público y debemos estar preparados”.

“Hemos instruido a los equipos del ministerio y Seremis para que se reúnan y dialoguen con gobernadores, delegados presidenciales, alcaldes y operadores del transporte público. El objetivo es levantar las necesidades de movilidad que cada territorio y diseñar soluciones en conjunto”, añadió.

Pineda precisó que en Santiago “instruimos tanto al seremi como al Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTPM) a trabajar con el Gobierno Regional y también con los operadores de transporte público, de tal manera de identificar los puntos críticos (…) y asegurar la accesibilidad a los distintos lugares de votación”.

Respecto a la eventual gratuidad del transporte público para esa jornada, afirmó que “hemos hecho un esfuerzo importante en el congelamiento de las tarifas y, por lo tanto, dentro de nuestro marco presupuestario creemos que hay que ser responsables, no queremos levantar falsas expectativas en cuanto a la gratuidad ese día”.

El plan

La directora de Transporte Público Metropolitano, Paola Tapia, manifestó que el plan consiste en tres puntos: “En primer lugar, busca concentrar la operación de los servicios de transportes en los lugares de votación de mayor alta afluencia de público”.

“En segundo lugar, implica revisar muy bien los puntos de congestión y los desvíos que vamos a realizar y, en tercer lugar, dar espacio para que los 6 millones de personas en el Gran Santiago que van a concurrir a votar puedan hacerlo en forma segura”, continuó.

Tapia enfatizó que “es de suma urgencia establecer un trabajo planificado, donde se considere la movilidad de las personas, las posibles congestiones y la implementación de desvíos, factores que no fueron considerados el pasado 19 de diciembre”.

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