Este martes terminaron los trabajos en el cierre perimetral del monumento al general Manuel Baquedano, dejando así una barrera blanca entre la vía pública y la tumba del soldado desconocido.
Con cerca de 3 metros de altura y con un peso de unas 12 toneladas resultó el cierre perimetral, poniendo fin a los trabajos que comenzaron con la remoción de la estatua del general Baquedano el 12 de marzo pasado.
El cerco perimetral contempla 34 barrotes de acero con láminas de 5 milímetros de espesor, características que le permitirían soportar el impacto de un vehículo a unos 80 kilómetros por hora.
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Tras 93 años en el mismo lugar, el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) tomó la decisión de retirar la estatua del general luego que desconocidos intentaran prender fuego en la base del monumento y, días después, intentaran cortar las patas del caballo.
Luego de ser retirada la estatua, se continuó el 14 de marzo con el cierre perimetral de la base del monumento y así concretar tareas de diagnóstico, protección y refuerzo al plinto y a la tumba del soldado desconocido.
Debido a que los trabajos se realizaban entre las 19:00 y las 07:00 del día siguiente, el ruido de soldadura y golpes a latas de metal generó molestia entre vecinos del sector, problema que se extendió por dos noches.
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