“Esperamos que cualquiera fuera el fallo, Bolivia lo respete”, recalcó el ministro.
Además dijo que la demanda boliviana es un “maquillaje” que busca encubrir ese objetivo, con la hipótesis que apunta a que Chile debe conversar sobre la aspiración marítima boliviana a partir de las “reuniones inconclusas”. También aseguró que durante los alegatos, Bolivia “va a esconder su propósito”, ya que durante el proceso la estrategia boliviana ha cambiado a partir de los consejos de sus abogados.
De este modo, el canciller explicó que van a argumentar de forma contundente que la corte no tiene competencia y que “está en juego es la petición de acceso soberano sobre territorio chileno y proyección marítima”
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