Cerca de 50 manifestantes se constituyeron durante la tarde del sábado en un barrio residencial de Alemania para “funar” a Hartmut Hopp, exmédico de Colonia Dignidad que huyó de Chile en 2011, tras ser condenado a cinco años de cárcel por su complicidad en delitos de abuso sexual a menores.
A pesar de su condena y una orden de captura internacional vigente, Hopp vive libremente en el país europeo, puesto que este no extradita a sus ciudadanos.
¿Qué pasó?
Deutsche Welle informó que la manifestación ocurrió en la ciudad alemana Krefeld, lugar al que acudieron estos protestantes chilenos y alemanes para participar en una tercera funa en las inmediaciones de la residencia de Hopp, después de las registradas en 2013 y 2018.
Con cuecas y pancartas acusatorias, los asistentes realizaron una jornada de conmemoración y protesta para que “todos los vecinos de Hopp tomen conciencia de quién vive realmente en su barrio”, consignó al medio europeo una vecina miembro de Medizinische Flüchtlingshilfe Bochum (MFH), la organización que convocó a la manifestación.
¿Quién es Hartmut Hopp?
El alemán de 79 años ejerció funciones como director del hospital de Colonia Dignidad, fundado en 1961, y fue uno de los más estrechos colaboradores del predicador luterano alemán condenado por cargos como violación, abuso sexual infantil y secuestro, Paul Schäfer, quien murió en 2010 a los 88 años por una insuficiencia cardiaca mientras cumplía condena en el hospital de la expenitenciaría de Santiago.
La extradición
Los intentos para que el exmédico de Colonia Dignidad enfrente a la justicia no han tenido efecto.
En 2018, el tribunal de Düsseldorf rechazó una solicitud chilena para que Hopp cumpliera su condena en Alemania. Un año después, la Fiscalía de Krefeld cerró una investigación otra investigación al considerar que la justicia chilena no entregó pruebas suficientes.
Juan Rojas Vásquez, hermano de detenidos desaparecidos en Colonia Dignidad, expresó desde el lugar que “esta funa es un paso más en la búsqueda de verdad y justicia en este país. Es una vergüenza que Alemania acepte que un alemán que comete crímenes en Sudamérica se arranque para acá y la justicia no haga nada”.
“Quienes han dado declaraciones han dicho que Hopp sabe lo que pasó con mis familiares. Tiene que acordarse, porque eran los únicos detenidos padre e hijo, todos los otros eran personas solas”, agregó el chileno.
Deja tu comentario