En la actualidad existe un proyecto de ley en el Congreso que fue aprobado por la cámara y está a la espera de ser votado en el Senado.
Fueron 12 líneas de las 40 páginas de su discurso, las que la Presidenta Michelle Bachelet destinó a la denominada Ley Emilia. Proyecto que busca endurecer las penas para el delito de conducir en estado de ebriedad con resultado de muerte o lesiones.
En su mensaje presidencial, la mandataria aseguró que el Gobierno propondrá el establecimiento de dos delitos relacionados a esto, uno simple y otro agravado. “El primero tendrá una pena que partirá en los 3 años y un día, que puede llegar hasta los 10 años. En el segundo la pena parte desde los 5 años y un día hasta 10 años, en el caso de huida, de reinicidencia de manejo en estado de ebriedad o drogas, misma pena que tienen hoy día los delitos de homicidio, robo con violencia o con fuerza”, expresó la Presidenta.
Medidas que para los especialistas podrían generar un problema estructural en el Código Penal, pues se trata de equiparar delitos completamente distintos.
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