Los consumidores tendrían que solicitar la sal a los meseros.
Retirar los saleros de las mesas de los restaurantes es el objetivo de una iniciativa anunciada por un grupo de parlamentarios oficialistas, que busca reducir el consumo de cloruro de sodio entre los chilenos. Una situación que casi triplica lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud.
La norma propuesta contempla que los recipientes estén disponibles pero a pedido del cliente, en una iniciativa similar a las que ya se han aplicado en países como México, Uruguay y que ya se discute en Argentina.
Pero la preocupación por el alto consumo de sodio y sus riesgos asociados de hipertensión, enfermedades cardiacas y cerebrales, daños renales y obesidad, ya estaría incluida en el conjunto de medidas de la reforma tributaria. La misma que propone subir el impuesto a los alimentos con alto contenido de grasas saturadas, azúcar y sal.
Una medida que genera diversos comentarios entre las personas, aunque el Gobierno asegura que podría ser una iniciativa interesante. Conoce más detalles en el informe adjunto.
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