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Ante las previsiones de consolidación del secado de pasto y malezas, el incremento de las posibilidades de siniestros y el historial de incidentes forestales de gran magnitud en Chile, el presidente Gabriel Boric encabezó el lanzamiento de una iniciativa destinada a abordar los incendios forestales de manera más rápida y eficaz.

Se trata del Plan Nacional 2023-2024 de prevención, mitigación y combate de incendios, una estrategia de fortalecimiento de la gestión durante estos eventos.

El plan busca minimizar el riesgo de ocurrencia, reducir la vulnerabilidad de las comunidades y ecosistemas de las regiones afectadas por los incendios y mejorar la coordinación de los equipos de respuesta.

Esta estrategia incluye tanto a actores públicos como privados y considera tres ejes principales: prevención y mitigación, preparación para la respuesta y comunicaciones.

Como parte de esta iniciativa, el Gobierno inició una coordinación interministerial para identificar aquella infraestructura crítica a nivel país que, bajo la dependencia o responsabilidad de cada uno de estos, pudiera estar vulnerable ante la ocurrencia de incendios, planificando la ejecución de acciones de prevención y mitigación.

Para fortalecer el Programa de Protección contra Incendios Forestales, se planificaron los recursos necesarios con un presupuesto total de $148 mil millones, que representa un incremento del 47% en comparación con la temporada anterior, que permitirá mantener 70 aeronaves y 311 brigadas terrestres entre Atacama y Magallanes.

El mandatario hizo una breve reflexión para cerrar la instancia: “A veces los que somos citadinos no dimensionamos el impacto que los incendios tienen, me tocó recorrer Quillón, Santa Juana, lugares recónditos de la del Biobío que estaban profundamente afectados por la muerte de la vida(…), siempre prevenir un incendio es mucho más fácil que combatirlo“, dijo.

Estos recursos se destinarán de la siguiente manera:

  1. Difusión, prevención y mitigación:
    • Aumento del personal de prevención de 178 a 205 profesionales.
    • Lograr que 237 comunidades en el país estén preparadas.
    • Objetivo de que las Unidades de Análisis y Diagnóstico (UAD) investiguen el origen y causa de al menos un 40% de los incendios.
    • Incremento significativo en la superficie manejada de mitigación, llegando a 7.500 ha, más del doble que en el período anterior.
  2. Preparación para la respuesta:
    • Planificación de 311 brigadas con un período de operación promedio de 6,4 meses.
    • Implementación de 28 brigadas de régimen nocturno para ampliar la cobertura de protección y combate.
    • Disponibilidad de aproximadamente 70 aeronaves, incluyendo 40 helicópteros, 4 aviones de dirección y coordinación del trabajo aéreo, 26 aviones cisternas, e incluso dos tanqueros o aeronaves de altas prestaciones con capacidades de descarga.

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