Los trabajadores del Servicio de Salud Metropolitano Central (SAMU) han debido adaptarse a una nueva modalidad de trabajo desde que comenzó la pandemia del COVID-19 en Chile.
“Si hay un procedimiento, me saco la ropa de la calle, me pongo el uniforme, y salgo”, relata Luis Cabrera, paramédico del SAMU Metropolitano mientras se prepara para ir con el equipo a un edificio después de recibir un llamado de un paciente COVID-19 positivo.
“Mi papá está diagnosticado hace unos días y ahora está muy grave”, se escucha en la llamada que atendió el personal de SAMU. “Está curva no se está aplanando”, acusa un funcionario antes de dirigirse al procedimiento.
Mientras van camino al lugar, el paramédico Fabián Muñoz, cuenta que “ha sido bastante complejo, estábamos acostumbrados a actuar en el mundo y ahora tenemos que tomarnos el tiempo de protegernos a nosotros mismos y a la ciudadanía”.
Al llegar al hogar del paciente, percatan que el sujeto presenta tos y mayor dificultad respiratoria. Cuando lo dejan en la sala de urgencias del hospital, de inmediato vuelven a encender las alarmas. “¡Muchachos, otro paciente Covid positivo!”, les avisan, y vuelven al trabajo.
Las ambulancias son “avanzadas” y cuentan con ventilador mecánico para trasladar a los pacientes con coronavirus que están en estado grave.
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El personal del SAMU va en camino a otro procedimiento, pero cuando llegan al lugar identifican que “efectivamente la familia está con coronavirus, pero no hay pacientes que requieran atención en este minuto”. A ese tipo de llamados los catalogan como “información falsa”, según declara la paramédica Paula.
Lilian Ortega, del Centro Regulador SAMU Metropolitano, afirma que “hay personas que llaman aumentando los síntomas, diciendo que tienen fiebre, dificultad respiratoria, con compromiso de conciencia, y la ambulancia va y no están en esa condiciones”.
En tanto, el doctor Juan de Dios Reyes, director del SAMU, declara que “han subido un 20% los llamados”.
Desde el servicio piden responsabilidad, puesto que “somos pocos móviles y necesitamos acudir a los principales llamados”.
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