El ministro Jaime Campos llevaba menos de 48 horas en el cargo cuando debió enfrentar su primera polémica: un eventual conflicto de intereses con la empresa francesa Morpho, señalada por el Registro Civil como la responable del error en el padrón electoral que cambió de local de votación a casi medio millón de personas, y que habría sido asesorada por un estudio de abogados que integra el secretario de Estado.
El titular de la cartera de Justicia se defendió diciendo que “yo no tengo ninguna sociedad profesional con el colega Francisco Zúñiga. Lo que sí tengo es una comunidad de techo”. Sin embargo, el Colegio de Abogados aseguró que una “comunidad de techo” sí implica conflicto de intereses según el código de ética del gremio.
Desde la oposición, en tanto, exigen la renuncia del nuevo ministro y han anunciado medidas considerando que Campos no está colegiado.
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