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En medio de la investigación contra el exalcalde de Vitacura, Raúl Torrealba, por los delitos de malversación de caudales públicos, cohecho, fraude al fisco, lavado de activos y falsificación de instrumento público, este jueves Radio Bío Bío reveló otra de las formas en las que se habría defraudado a las arcas del municipio: a funcionarios municipales de ese entonces se les habría pedido que solicitaran millonarios créditos y el dinero en efectivo iba a Domingo Prieto Urrejola.

Domingo Prieto Urrejola, amigo de Torrealba, expresidente legal del Consejo Local de Deportes y directivo de las organizaciones comunitarias “Vita”, fue quien reveló la situación que se habría extendido por más de 10 años al interior de la sede municipal.

¿Qué pasó?

En su declaración al Ministerio Público, el contador Augusto César Silva, quien trabajó en el Consejo Local de Deportes, detalló que Prieto Urrejola le solicitaba, tanto a él como a otro funcionario, “dinero personal nuestro para las instituciones y para fines municipales”.

En esta línea, señaló que “era tanta la plata la que me pedía don Domingo, que requerí de préstamos con el banco para poder entregársela”. También contó que había pedido un crédito anteriormente, pero que nunca pudo prepagarlo “porque estaba obligado a destinar la plata a estos requerimientos de don Domingo”.

“(En 2017) Don Domingo me empezó a pagar las cuotas del crédito desde el Consejo Local de Deportes y contra boletas le exigió conseguirse a Arnaldo (contador de los programas municipales Vita Emprende y Vita Deportes) para respaldo“, agregó el profesional.

Según Silva, en el mes de junio o julio del 2020 se dejaron de emitir estas boletas al Consejo Local de Deportes y se empezaron a emitir a Vita Deportes por orden de Domingo Prieto y Antonia Larraín, directora subrogante de Desarrollo Comunitario y persona cercana a Torrealba.

A Arnaldo Cañas González, contador de los programas Vita Emprende y Vita Deportes, también le pidieron sacar créditos. “Pagué gastos con línea de crédito y con mi tarjeta. La plata era para gastos de la piscina o porque me las pedían para la Municipalidad, también parte de la plata que pedí prestada fueron para préstamos que me pedía don Domingo a título personal”.

El exfuncionario sostuvo que en un momento quiso salir de esta situación y renunciar, pero serios problemas de salud se lo impidieron: “Estaba presionado por los altos montos de los préstamos y por mi enfermedad (…). Así que decidí afrontar el trabajo y asumir las órdenes de mi jefe, con el miedo constante de que mi préstamo no fuera pagado”.

Para pagar los créditos, la municipalidad le habría exigido a Cañas conseguir personas para realizar boletas, lo cual concuerda con la declaración de Silva. “Domingo Prieto, Renato Sepúlveda y Antonia Larraín estaban en conocimiento de la enfermedad que me afectaba. Como era tanto el dinero que regularizar, me siguieron exigiendo más profesionales para emitir boletas y cubrir las cuotas de préstamo”, detalló a la Fiscalía.

Arnaldo Cañas señaló que, en su caso, todo comenzó el 10 de febrero del 2016, cuando debió pedir un préstamo por $5.000.000 al banco Falabella. El último fue en abril de 2020 cuando se refinancia nuevamente el crédito “pidiendo un aplazamiento de cuotas para poder cancelar las diferencias a Cesar Silva. Quedando una deuda de $62.100.000 en 48 cuotas de $1.505.000″.

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