Fue el único funcionario público que se mantuvo en ejercicio a pesar de las querellas y denuncias en su contra.
Wilfredo Valdés renunció este martes al puesto de seremi de Vivienda de la Región de O’Higgins tras las críticas que ha recibido por su rol en el caso Caval. A través de un comunicado, la ex autoridad aseguró que los cuestionamientos carecen de todo fundamento.
Valdés informó que puso su “cargo a disposición de la ministra de Vivienda, Paulina Saball” y afirmó que con esta determinación podrá “darle cuerpo” a su defensa y tendrá la “libertad para tomar las acciones necesarias que sirvan para esclarecer las dudas que se han planteado” sobre su persona. Sin embargo, su abogado afirmó que la renuncia no fue aceptada.
En ese contexto, el ministro vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, sostuvo que la decisión es “personal” y que es respetada por La Moneda. “A nosotros nos corresponde respetar esa decisión“, recalcó Díaz.
En tanto, Jorge Insunza, ministro secretario general de la Presidencia, afirmó que Valdés cree que una investigación puede significarle “una sobreexposición”, luego de que el Seremi fuese acusado ante la Fiscalía por parlamentarios de Renovación Nacional, quienes sostienen que cometió “violación de secreto” en su actuar.
El diputado Juan Luis Castro (PS) sostuvo que la situación del Seremi era “insostenible” luego que fue declarado imputado y que existía “una contradicción que no se podía mantener en el tiempo” a raíz de su rol previo como tasador de los terrenos que la empresa Caval adquirió en Machalí. Asimismo, otros parlamentarios como Felipe Letelier llaman a revisar los antecedentes de las autoridades, mientras que desde la oposición recalcaron que desde el comienzo solicitaron que el Seremi pusiese su cargo a disposición.
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