El comercio sexual en el corazón de la ciudad de Santiago siempre ha existido, siendo visible incluso a plena luz del día. En paralelo a las partidas entre ajedrecistas, la organización de bandas criminales ha aumentado al punto en que hoy tienen el control en diversas locaciones del sector. Entre ellos, el Portal Fernández Concha, donde estos grupos se dedican a la trata de personas, explotación sexual, venta de armas, narcotráfico y secuestros.

Todo lo cual ha sido revelado en la investigación de Ciper, que indica que en este sector se han instalado bandas criminales dedicadas a la trata de personas y a la explotación sexual de mujeres, así como también al narcotráfico,  la venta de armas, y a los secuestros.

Entre esas bandas se encontraría incluso el Tren de Aragua.

La Fiscalía ha detectado que en todo el sector de Plaza de Armas explotan sexualmente a adolescentes y mujeres mayores de edad.

Asimismo, entre las bandas criminales que controlan el territorio habría algunas dedicadas a cometer otros ilícitos como tráfico de drogas y de armas, secuestros y extorsiones.

Hace pocas semanas la Policía de Investigaciones (PDI), encontró a una menor de edad, de nacionalidad venezolana, que era obligada a ejercer el comercio sexual. Este hecho se reportó el pasado 29 de noviembre, y actualmente se encuentra en calidad de víctima por el delito de trata de personas.

¿Cómo opera el comercio sexual y las bandas criminales?

La organización del negocio opera por medio del registro a los clientes que realizan los guardias y conserjes, allí queda anotado el nombre, rut y el departamento al que se dirigen.

En esa nómina no se anota la información personal de las trabajadoras sexuales, ni tampoco la de los vecinos residentes ni de quienes ingresan a alojarse en el hostal que funciona en el sexto piso, que en general son turistas extranjeros.

Los inmuebles han sido modificados para tener varias camas en su interior, en ocasiones solo están separadas por material ligero u cortinas. Y estas bandas organizadas pueden llegar ofrecer hasta más de $1 millón para arrendar estos departamentos.

Y dentro de estas habitaciones se han registrado diversas situaciones de riesgo, como personas que han sido golpeadas e incluso apuñaladas mientras sostenían relaciones sexuales, pero que evitan denunciar por miedo a verse involucrados en pagar por tener sexo.

El 22 de junio de 2021, por ejemplo, un proxeneta recibió un disparo en la cabeza luego que dos clientes le reclamaran el robo del dinero de sus mochilas, mientras sostenían un encuentro con las trabajadoras sexuales. Al hombre lo dejaron tendido en el hall del acceso del edificio, y hasta septiembre del mismo año estuvo internado en la ex Posta Central.

Comunidades de estos edificios han acusado que también se llevan a cabo préstamos de dinero por fuera de los marcos legales, además de venta de drogas y de armas. A la luz de estos acontecimientos, la PDI ya ha realizado allanamientos, de los cuales aún no hay mayores antecedentes debido a que se tratan de investigaciones en curso.

Fuentes que participan de estas investigaciones afirmaron a Ciper que la situación es preocupante ya que las bandas criminales no están operando solo en el portal, sino también en otros lugares del epicentro de Santiago.

“Desde nuestro país y no solo desde el Municipio, necesitamos enfrentar la prostitucion. Hoy miramos ésto solo con herramientas de orden local que ayudan, sin duda, a mitigar algunos dolores, a disputar el espacio y coordinar esfuerzos inter institucionales pero que -hasta ahora- son aún precarios e insuficientes en término de resultados”, señaló la concejala Dafne Concha.

Y agregó que “nuestra apuesta como concejalía es entrar en un debate profundo con la ciudadanía y el Estado, que permita generar caminos para penalizar a los proxenetas y a los consumidores de prostitución, saliendo en ayuda de quienes ejercen el trabajo sexual y protegiendo especialmente a los niños, niñas y adolescentes”.

Tags:

Deja tu comentario