(CNN Español) – En el camino del fútbol argentino hay varias estaciones, algunas más importantes que otras, pero hay una en especial que concentra la mayor atención. Es la que dice: Bienvenidos al superclásico Boca Juniors versus River Plate.
Este domingo xeneizes y millonarios se verán nuevamente las caras y será en el templo del barrio de La Boca -La Bombonera- en el marco de la séptima fecha del torneo doméstico, la Copa Liga Profesional 2023.
Boca, y la búsqueda de una victoria, para mejorar su irregular andar en el torneo local.
En el certamen, dividido en dos zonas de 14 equipos cada una, Boca se ubica en la zona B en el noveno lugar con siete unidades. El xeneize está a cinco puntos del líder, Racing Club, producto de dos victorias, un empate y tres derrotas.
En los tres últimos partidos, el equipo que dirige Sergio Almirón dio muestra de su irregular presente futbolístico: perdió en la fecha 4 como visitante ante Defensa y Justicia; también de visitante goleó 3-0 a Central Córdoba de Santiago del Estero y empató a uno como local ante Lanús.
Paralelamente a este gran duelo, Boca está en medio de un momento muy especial en lo deportivo, ya que el jueves jugó en su estadio la primera semifinal de la Copa Libertadores frente a Palmeiras, de Brasil. El partido -finalizó en un empate en 0- fue de gran intensidad, lo cual motivó que algunos jugadores acusaran recibo del desgaste.
Uno de ellos es Marcos Rojo, quien fue sustituido por una sobrecarga muscular. Otro jugador y pieza sustancial en el once titular de Boca, Valentín Barco, también acusó cansancio, por lo que fue reemplazado en el segundo tiempo. “A Valentín en el primer tiempo le dieron un rodillazo en la cabeza e hizo un desgaste enorme”, aseguró Almirón.
Boca tendrá el jueves 5 la revancha, por lo que el técnico aguardará hasta último momento para confirmar el equipo, pensando en la recuperación física y mirando de reojo qué interpretes son los mejores para disputar tanto un encuentro como el otro.
Ante Palmeiras, sus dirigidos hicieron un buen partido, estuvieron cerca de ganar y esperan que esa sólida producción se repita ante su rival de siempre. Boca ha sido hasta aquí un equipo fuerte en temperamento, con mucho temple para buscar la victoria y con algunas pinceladas de calidad. No obstante, las prestaciones en el torneo local no han tenido brillo, ni la continuidad acorde al gran plantel con el que cuenta.
River querrá dejar atrás sus vacilantes producciones de visitante.
El equipo de Martin Demichelis es el último campeón del fútbol argentino, pero quedó eliminado en octavos de final de la Copa Libertadores y llega desde lo físico con una semana sin compromisos y solo enfocado en su rival eterno.
El millonario se consagró de manera demoledora en el campeonato llamado Liga Argentina 2023. Ese fútbol de galera y bastón, dinámico, electrizante y sin fisuras que mostró en la primera parte del año, ahora ha perdido vitalidad, frescura y brillo.
River sigue siendo un equipo de gran jerarquía, pero en el camino ha sufrido impactos. El millonario intercala prestaciones de fuste como local -ganó los tres partidos que jugó en su estadio- pero, de visitante, su merma futbolística es notoria: empató un juego y perdió los dos restantes.
De manera que tener enfrente a Boca en la mismísima Bombonera es un desafío de alto calibre. Ganar, recuperar la memoria y dejar a su rival de toda la vida con el orgullo herido se impone como un gran reto.
En la última fecha River Plate empató a uno en su visita a Banfield, que terminó dejando una mejor imagen y de haber ganado nadie se hubiera sorprendido.
En el actual torneo doméstico argentino, River Plate se ubica en la 4ta posición de la zona A con 10 unidades, a solo dos del líder Huracán.
En la semana, Demichelis trabajó tácticamente buscando el once titular y probó varias alternativas.
El viernes el técnico millonario probó tanto con Milton Casco como con Andrés Herrera en el sector derecho de la defensa. Santiago Simón sería quien perdería el puesto. Leandro González Pires reemplaza en la zaga central a Ramiro Funes Mori y el lateral izquierdo podría ser Enzo Diaz.
El probable equipo de acuerdo con lo trabajado en toda la semana sería: Franco Armani sea el arquero; en la defensa Andrés Herrera o Milton Casco, Leandro González Pires, Paulo Díaz y Enzo Díaz; Enzo Pérez y Nicolás de la Cruz en el eje del mediocampo; una línea de 3 bien delante de los dos mediocampistas, integrada por Nacho Fernández, Manuel Lanzini y Esequiel Barco. Miguel Angel Borja sería la única opción neta en la ofensiva.
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