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Si bien aún no termina sus estudios en el John Jay College of Criminal Justice, en Nueva York, Nathan Tankus, de 28 años, ya se ha convertido en un referente incluso para la Reserva Federal estadounidense.

Difundiendo su mensaje principalmente por un newsletter y sus redes sociales, Tankus tiene como seguidores, además de la Reserva Federal, a la Comisión de Bolsa de Valores, la Oficina del Contralor de la Moneda, entre otros.

Su Twitter es seguido por todo tipo de profesionales vinculados al mundo económico: periodistas, economistas de Wall Street e incluso pensadores de la economía.

La clave de este joven radica en la exactitud de sus análisis sobre fenómenos económicos y, más complejo aún, los comunica en palabras sencillas, accesibles para quienes desconocen los fundamentos de esta área de la sociedad.

Cristián Echeverría, director del Centro de Estudios en Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo, lo describe como “un economista en ejecución”, un autodidacta y “buen aprendedor”. “Su nicho actual, lo que ha explotado astutamente, es reaccionar de forma rápida y documentada con sus impresiones”, agrega, sobre temas de prácticas monetarias y macroeconomía.

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A su trabajo en Twitter, Nathan Tankus creó un sitio web donde comparte sus reflexiones en torno a las acciones que la Reserva Federal ha tomado para combatir la recesión generada por la pandemia de coronavirus.

En Notas sobre la crisis, revisa declaraciones hechas en medios públicos, movimientos de la Reserva e incluso contesta a análisis de economistas de renombre. “Mi enfoque aquí estará en el análisis monetario, que no es lo mismo que políticas monetarias (aunque hablaré de eso también mucho)”, explica el mismo Tankus.

“Son pocos los economistas que tienen la capacidad de bajar en lenguaje sin descuidar la sofisticación del análisis técnico. Explicarlo en sencillo. Esa habilidad no es muy común en la profesión“, añade Echeverría.

Se premia la pasión

La presencia de Tankus en Internet comenzó en 2015, pero no fue hasta el 2019 que su audiencia se disparó. Todo esto, sin siquiera tener un diploma.

Esto se puede deber a que en redes sociales no existe una necesidad por exponer tus credenciales, sino más bien sopesar las ideas que se exponen. En ese sentido, la aguda visión de Tankus se respalda en años de lectura autoimpuesta, donde adquirió conocimiento de Milton Friedman, Anna Schwartz, John Maynar Keynes y Hyman Minsky, entre otros.

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A ello sumó “cursos de autoformación respecto de temas sobre economía, en particular sobre el mundo financiero”, explica Marcela Vera, académica de la Facultad de Administración y Economía de la Universidad de Santiago.

“Que un estudiante de leyes haya podido descifrar este mundo más financiero, y lo haya llevado desde un lenguaje técnico a uno cotidiano, es parte del proceso de cómo las nuevas generaciones se instalan a través de un discurso en las redes sociales“, añade.

Por esto, parte del mensaje que entrega Nathan es que las credenciales que da un título académico no es relevante cuando uno discute algo por redes sociales. “Finalmente, la gente siempre premia la pasión y dedicación con las que uno realiza los análisis en redes sociales“, afirma Vera.

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La académica sólo repara en que a Nathan “le falta énfasis en cómo se plantea este eje de cambio civilizatorio, que viene de la crisis COVID, y por tanto, una podría prever fácilmente las proyecciones financieras si utiliza las herramientas técnicas adecuadas”.

Fuera de ello, Nathan Tankus ya se ha asegurado un nicho: a través de su sitio web ha abierto una opción de suscripción pagada, con la cual los usuarios pueden acceder a contenido con una mayor profundidad de análisis y sobre temas más complejos. Ya son al menos 450 los que pagan hasta US$45 mil al año por este contenido.

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