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(CNN) — Mientras Israel continúa su cuarta semana de intensos bombardeos sobre la asediada Franja de Gaza, grandes multitudes de manifestantes se han reunido para pedir un alto el fuego en Washington, DC, así como en otras capitales de todo el mundo.

La participación del sábado es una continuación de las protestas que han surgido en todo el mundo en respuesta a las intensas represalias de Israel por los ataques terroristas de Hamás del 7 de octubre, que mataron a más de 1.400 personas, incluidos civiles y soldados.

Los incesantes bombardeos israelíes han matado a casi 10.000 personas en Gaza, muchos de ellos civiles y una gran parte de ellos niños. Los ataques aéreos israelíes han tenido como objetivo hospitales, escuelas, campos de refugiados y ambulancias, provocando la indignación de la comunidad internacional y advertencias de grupos de derechos humanos de que los ataques pueden constituir crímenes de guerra.

Una transmisión en vivo mostró multitudes que casi llenaban Freedom Plaza, ubicada cerca del National Mall y la Casa Blanca. Los organizadores dijeron a CNN que esperaban que asistieran decenas de miles.

Las protestas son “un testimonio de cuánto más apoyo ha aumentado en torno al movimiento de solidaridad palestino y de que la gente realmente quiere ver que se produzca un cambio”, dijo Iman Abid-Thompson, director de promoción de la Campaña estadounidense por los derechos de los palestinos, uno de los grupos que organizan la protesta en Washington DC, en una entrevista con CNN.

Esto se ha convertido ahora en una elección moral“, prosiguió. “Y creo que o eliges hablar y apoyar a los palestinos o eliges apoyar un genocidio”.

La protesta atrajo a estadounidenses de ciudades de todo el país que viajaron a la capital nacional en cientos de autobuses organizados por grupos comunitarios locales y organizaciones progresistas.

En una declaración, la Asamblea Popular Internacional, que también ayudó a organizar la protesta, dijo que “la marcha será la más grande a favor de Palestina en la historia de Estados Unidos”.

Los vídeos de la manifestación muestran multitudes de manifestantes, muchos de ellos vistiendo la kaffiyeh (un pañuelo estampado que se ha convertido en un símbolo de la identidad palestina) y portando banderas palestinas. “Detengan la masacre” y “Dejen vivir a Gaza“, rezaban carteles entre el público.

Varios organizadores se dirigieron directamente al presidente Joe Biden y encabezaron cánticos de “Biden, Biden, no puedes esconderte, te acusamos de genocidio” y “sin alto el fuego, sin votos”.

Más de 450 organizaciones han respaldado la marcha, dice la Asamblea Popular Internacional. Además de un “alto el fuego inmediato”, los manifestantes también piden el fin de la ayuda militar estadounidense a Israel y el fin del bloqueo a Gaza.

El activista y escritor palestino Mohamed el Kurd se dirigió a la multitud, pidiéndoles que consideraran “las vidas de nuestros mártires, sus quejas, sus pasatiempos y, sobre todo, quiero que consideren el miedo, el miedo que debieron haber sentido cuando los aviones de guerra se elevaron sobre sus cabezas”.

El rapero Macklemore también subió al escenario y dijo: “No lo sé todo, pero sé lo suficiente que esto es un genocidio“.

“Nos han enseñado a ser simplemente cómplices, a proteger nuestras carreras, a proteger nuestros intereses”, dijo. “No voy a hacerlo más, no tengo miedo de decir la verdad”.

“Esta ola de protestas que lideramos en Estados Unidos y en todo el mundo se encuentra entre las más grandes que hemos visto en Palestina y habla de la realidad de que los palestinos ya han tenido suficiente”, dijo Yara Shoufani, organizadora del Movimiento Juvenil Palestino en un correo electrónico a CNN. “Durante 75 años, el pueblo palestino ha estado enfrentando colonización y ocupación militar, y en el caso de Gaza ha sido una prisión al aire libre debido al bloqueo de Israel”.

Shoufani dijo que la protesta sirve como una oportunidad para comunicar el creciente sentimiento contra la guerra entre una gran parte del pueblo estadounidense, particularmente porque el presidente y otros altos funcionarios han seguido declarando su apoyo a Israel.

“Estamos dejando claro a la administración estadounidense que rechazamos este acto atroz y rechazamos la negativa de Biden a pedir un alto el fuego a pesar de que el 66% de los estadounidenses apoyan un alto el fuego”, dijo a CNN, refiriéndose al paquete de ayuda militar de 14.300 millones de dólares para Israel aprobado por el Congreso esta semana. “Nuestro objetivo es enviar un mensaje al público estadounidense para que se una a nosotros en este movimiento de masas, que crece minuto a minuto y que defiende la libertad y la justicia”.

“Y, por último, pretendemos enviar un mensaje a nuestro pueblo en Gaza de que no están solos: que no nos quedaremos de brazos cruzados mientras nuestro gobierno financia su genocidio”, añadió.

Abid-Thompson dijo que la manifestación también sirve como una oportunidad para “mostrar y centrar la dignidad en torno a las vidas palestinas” y evitar la normalización de las víctimas palestinas masivas.

Las autoridades israelíes han rechazado los llamados a un alto el fuego, diciendo que no sería posible hasta que todos los rehenes sean liberados. Israel sostiene que no tiene como objetivo a civiles y que sus ataques en la franja tienen como objetivo erradicar a Hamás, la organización islamista militante que gobierna Gaza y es considerada un grupo terrorista por Estados Unidos y la UE, entre otros países.

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Los manifestantes salen a las calles en todo el mundo

Además de Washington, DC, manifestantes pro palestinos también marcharán el sábado en otras ciudades importantes del mundo para exigir un alto el fuego.

Miles de personas se reunieron en Trafalgar Square de Londres para la tercera manifestación consecutiva de fin de semana en la ciudad, portando banderas palestinas y pancartas con las frases “Alto el fuego ahora” y “Dejen de bombardear a los niños“. La Policía Metropolitana estimó una participación de 100.000 personas en la primera marcha de solidaridad.

“40.000 personas llenaron hoy Trafalgar Square para apoyar a Palestina y exigir un #Alto al Fuego AHORA”, publicó el sábado en las redes sociales el organizador del evento, la Campaña de Solidaridad Palestina. La Policía Metropolitana de Londres no ha publicado cifras sobre el tamaño de la manifestación.

El sábado también se llevaron a cabo manifestaciones pro-palestinas en otras ciudades del Reino Unido, incluidas Manchester, Oxford, Newcastle y Liverpool.

Miles de personas también salieron a las calles en toda Europa y América Latina para pedir un alto el fuego el sábado, con manifestaciones en ciudades capitales como París, Francia; Berlín, Alemania; Santiago, Chile; y Caracas, Venezuela.

También surgieron manifestaciones en Filadelfia y Nueva York en Estados Unidos.

Los funcionarios estadounidenses han advertido que el malestar israelí por la escala masiva de víctimas civiles ha aumentado y puede hacer imposible que las FDI lleven a cabo sus objetivos declarados, como informó anteriormente CNN.

La semana pasada en Nueva York, cientos de manifestantes de una organización judía que pedía un alto el fuego fueron arrestados en la estación Grand Central.

Y el viernes, manifestantes en el puerto de Oakland intentaron retrasar un barco militar que supuestamente transportaba ayuda militar a Israel, según KABC-TV, afiliada de CNN.

Para Tahia Islam, organizadora del Foro del Pueblo de Nueva York, el aumento del apoyo estadounidense a la causa palestina es una consecuencia natural de los movimientos por la justicia social de los últimos años, incluidas las protestas de 2020 por la muerte de George Floyd.

“Muchas personas están conectando este momento con las formas de sentir lo que saben sobre el gobierno de Estados Unidos y lo que han visto en los últimos años de otros movimientos de protesta, movimientos populares aquí”, dijo en una entrevista con CNN.

Señaló la ayuda militar estadounidense a Israel como un punto clave de discordia.

“Hay mucha energía clara en que no queremos que todo este dinero se desvíe hacia la guerra, lo queremos para la atención médica, la educación y la vivienda”, dijo.

“Nuestras voces no se sienten representadas en absoluto”, dijo. La protesta ofrece la oportunidad de “hacer una declaración al resto del mundo” y “alterar el status quo”.

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