(EFE) – El director general de la Policía Federal de Brasil, Andrei Rodrigues, prometió llevar a los tribunales a todos los implicados en el intento de golpe de Estado del 8 de enero de 2023.
El máximo jefe policial de Brasil dijo en una entrevista a EFE que la operación “Lesa Patria”, que investiga a los patrocinadores de los actos golpistas perpetrados por la extrema derecha, continuará con tantas fases como sean necesarias.
“Nuestro objetivo final es presentar ante la Justicia a todas las personas que de alguna manera participaron en los actos delictivos. Y eso implica los principales financiadores y ejecutores”, aseveró.
De acuerdo con Rodrigues, es muy complicado dar un plazo para la conclusión de las investigaciones, porque ese proceso “tarda en madurar”.
“Seguimos centrados en presentar pruebas ante la Justicia”, completó Rodrigues, quien evitó comentar detalles sobre las investigaciones que buscan determinar la posible responsabilidad del expresidente Jair Bolsonaro en instigar a sus seguidores.
Las pesquisas, según recalcó Rodrigues, tienen lugar independientemente de que los investigados “sean militares, civiles, de cualquier profesión, estrato social, político o económico”.
La Policía investiga el intento de golpe de Estado del 8 de enero de 2023, sucedido una semana después de la investidura del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Ese día una horda de miles de bolsonaristas radicales asaltaron y las sedes de los tres poderes en Brasilia, causando cuantiosos daños, en un intento de forzar una intervención militar para deponer a Lula.
La acción, por la cual fueron detenidas 2.170 personas, de las cuales 1.413 personas han sido imputadas, entre ellos 1.156 por cargos de incitación, 248 por la invasión a las sedes de los tres poderes, un financiador y 8 agentes públicos.
Entre ellos, 30 personas ya han sido condenadas por el Tribunal Supremo por varios cargos, entre ellos intento de golpe de Estado, con penas que llegan a los 17 años de cárcel.
Rodrigues comparó la respuesta de la Policía brasileña con lo sucedido en Washington tras el asalto al Capitolio, el 6 de enero de 2021, casi dos años antes.
Ese día, simpatizantes del expresidente Donald Trump irrumpieron en el Capitolio con el objetivo de boicotear la sesión parlamentaria en la que se iba a certificar la victoria de Joe Biden en las elecciones de 2020, obligando a los legisladores a esconderse.
“Hemos investigado a más personas, hemos detenido a más personas, la Justicia ha funcionado. Ya hay personas condenadas”, manifestó Rodrigues.
“Es importante establecer un paralelismo entre el 8 de enero de Brasil y el Capitolio: nuestra respuesta como Estado brasileño, como instituciones, fue mucho más eficaz“, agregó.
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