Una serie de servicios podría quedar inhabilitada, mientras que el turismo podría verse seriamente afectado.
El Congreso de Estados Unidos, deberá votar en aprobación o modificación de la Ley de Presupuesto antes de la medianoche de este lunes 30 de septiembre. En caso de no llegar a un acuerdo, casi 800 mil empleados públicos dejarán de trabajar y los dineros del Fisco escasearán al punto de que grandes atracciones turísticas podrían cerrar, si es que no reciben una nueva inyección de recursos.
Además, se verían afectados Parques nacionales, renovación de pasaportes del Registro Civil, la policía fronteriza y la recolección de basura en Washington. “No tiene que ocurrir. Todo esto se puede evitar si la Cámara de Representantes hace lo que el Senado ya hizo, que es simplemente dale financiamiento a nuestro Gobierno sin generar demandas controversiales en el proceso”, menifestó el Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama.
En el año 1995, al no llegar a un acuerdo al respecto, el Gobierno cerró perdiendo US$400 millones y actualmente, los dos grandes partidos continúan en una disputa frente a una ley emblemática para Obama, la Reforma de Salud, llamada la “Obamacare”.
Mientras, las oficinas públicas se encuentran preparadas para que su personal no esencial presente licencias sin goce de sueldo hasta nuevo aviso.
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