Las fuerzas especiales de la Policía de Ecuador afuera de la embajada de México en Quito. (Crédito: ALBERTO SUAREZ/AFP via Getty Images)

La madrugada de este sábado la Policía Nacional de Ecuador irrumpió las instalaciones de la Embajada de México en Quito, para luego capturar al exvicepresidente Jorge Glas. El hecho provocó gran revuelo tanto a nivel nacional como internacional, y distintos líderes latinoamericanos repudiaron el accionar de Ecuador.

Además, tras la irrupción México rompió inmediatamente las relaciones diplomáticas con el país gobernado por Daniel Noboa.

¿Qué dijo Ecuador?

El Gobierno ecuatoriano publicó un comunicado en el cual informaron que Jorge Glas, “condenado a pena privativa de libertad por la justicia ecuatoriana” fue detenido “y puesto a órdenes de las autoridades competentes”.

Además, señalaron que “toda embajada tiene una sola finalidad: servir como un espacio diplomático con el objetivo de estrechar las relaciones entre los países”. Esto, luego de que distintos países del continente acusaran a Ecuador de pasar a llevar la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954.

“Ningún delincuente puede ser considerado un perseguido político. Jorge Glas ha sido condenado con sentencia ejecutoriada y contaba con disposición de captura emitida por las autoridades competentes. Ecuador enfrenta un conflicto armado no internacional, cuyas repercusiones en la democracia y paz ciudadana, solo serán incrementales de continuarse o condonarse actos que interfieran con el Estado de Derecho, la soberanía nacional o con temas de injerencia en asuntos internos del país”.

En esa línea, recalcan que “al haberse abusado de las inmunidades y privilegios, concedidos a la misión diplomática que albergaba a Jorge Glas, y conceder un asilo diplomático contrario al marco jurídico convencional, se ha procedido con su captura. Ecuador es un país soberano y no vamos a permitir que ningún delincuente quede en la impunidad”.

De ese modo, el Ejecutivo reiteró su “respeto al pueblo mexicano que comparte nuestro sentir por la lucha contra la corrupción que afecta a nuestros países”.

¿Qué pasó?

El operativo policial sorprendió a la comunidad internacional y ha levantado una ola de críticas por parte de diversos sectores políticos y sociales.

En el momento de la detención, Glas se encontraba bajo la protección de la inmunidad diplomática que ofrece una embajada extranjera, lo que ha generado preocupación por el respeto a los derechos humanos y la integridad de las sedes diplomáticas en el país sudamericano.

Un equipo de CNN fue testigo de cómo policías subieron por uno de los muros de la sede diplomática para ingresar a la misma y vio salir camionetas negras de la sede diplomática más tarde.

Roberto Canseco, jefe de Cancillería de la Embajada de México en Ecuador, dijo a CNN que “lo que acaban de ver es un atropello en contra del derecho internacional y la inviolabilidad de la embajada de México en Ecuador. Totalmente inaceptable. Esto no puede ser. Es la barbarie. Es imposible que violen el recinto diplomático como lo ha hecho”.

Medio internacionales han asegurado que durante la detención de la exautoridad, habrían reducido físicamente al jefe de la Cancillería y Asuntos Políticos de la Embajada, Roberto Canseco.

Jorge Glas, quien fue “condenado a pena privativa de libertad por la justicia ecuatoriana, ha sido detenido esta noche y puesto a las órdenes de las autoridades competentes”, informó el Gobierno de Ecuador. Y agregó que se le había concedido un asilo diplomático “contrario al marco jurídico convencional”. 

Tags:

Deja tu comentario