Este lunes el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció que convocará a una Asamblea Nacional Constituyente, argumentando que “la Asamblea Nacional está podrida”.
En conversación con CNN Chile, el director para América de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, señaló que “es una trampa más, una fuga hacia adelante”.
“Esta propuesta supone la disolución de la Asamblea Legislativa, donde hay una abrumadora mayoría de la oposición. Es prácticamente el único poder del Estado que tiene un grado imprtante de legitimidad”, acusó Vivanco.
“¿Cómo puede plantearse Maduro un proceso constituyente con la disolución del principal órgano de manifestación de la oposición y con cientos de prisioneros políticos?”, agregó.
Finalmente dijo enfático: “Aquí no hay garantías, esto no es serio y esto no es la solución que Venezuela requiere frente a esta crisis. La solución para lo que vive Venezuela es una presión concertada de la comunidad regional por la vía de la carta democrática“.
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