El saliente mandatario argentino, Alberto Fernández, introdujo cambios a un decreto de 2019 que extiende las responsabilidades de la Casa Militar para brindar protección vitalicia a todos los expresidentes y sus familiares en cualquier parte del mundo, a horas del fin de su gestión. Anteriormente, esta custodia se limitaba al territorio nacional.
¿Qué pasó?
De acuerdo al recién instalado decreto, los costos de seguridad de estos viajes recaerán en el Estado argentino, que tendrá que financiar la protección del expresidente mientras esté en el extranjero.
La firma modifica un decreto previo instalado por el mismo Fernández en 2019, que estipulaba a la Casa Militar como encargada de proteger a los exmandatarios dentro del país al abandonar el poder.
Dado que este cambio fue implementado mediante un decreto, el presidente Milei podría revocarlo con una medida similar. Algunos miembros de la Casa Militar expresaron que consideran este régimen de custodia como insostenible y creen que probablemente será anulado en el futuro.
“Es carísimo custodiar fuera del país a un exmandatario. Primero porque puede sacar un pasaje e irse mañana a un lugar y hay que preparar todo para acompañarlo. Además, se trata de policías armados que requieren acuerdos y convenios con los terceros países para poder ingresar el armamento. Una cosa es que se prepare una gira presidencial, donde estos permisos son fáciles y de rutina, y otra cosa son las escapadas de los exmandatarios. Además, hay que solventar todos los viáticos de los policías que viajen. Y en dólares”, expresó un miembro anónimo de la Casa Militar a Infobae.
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