Los islamistas pidieron intercambiar a dos estadounidenses por dos de los suyos.
Las primeras imágenes de los trabajadores de la planta de gas en Argelia, asaltada por islamistas, los muestran libres. Llegar a este punto no fue fácil, ya que una treintena de sus compañeros murió y un número similar siguió en manos de los extremistas en un sector de la planta que no pudo ser controlado por el agresivo operativo de este jueves.
Los encerrados en esta planta eran de diversas nacionalidades. La crisis alertó a los gobiernos del Reino Unido, Francia, Japón , Noruega y Estados Unidos entre otros.
El ejército argelino se hizo cargo de las operaciones, mientras las cancillerías extranjeras demandaban más información acusando que todo fue muy poco claro.
En tanto, Francia declaró que actos como el secuestro reafirmaban su decisión de entrar con tropas al Sahara, por lo que este viernes instalaron sus bases.
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