El grupo radical fue creado en el año 2002 y habría provocado más de 1.500 muertes en el país.
Un doble atentado en una estación de buses y el secuestro de más de 100 escolares, son dos de las últimos episodios protagonizados esta semana, aparentemente, por Boko Haram. Una guerrilla islámica de Nigeria que se está expandiendo y comienza a preocupar al mundo, mientras ellos se defienden diciendo que sólo quieren mejorar el país.
En tanto, el presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, aseguró que “la confrontación militar está ocurriendo ahora mismo. Hay que reducirlos de cualquier manera, pero la confrontación militar sola no eliminará los ataques terroristas.”
Mientras, Boko Haram culpa al gobierno tildándolo de corrupto, que sigue la ideología y religión occidental, y que no ha mejorado a un país donde el 70% de las personas vive en la pobreza.
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