Dos aves caminaron lentamente, con el cuello hacia abajo y los ojos apenas abiertos. Una se desmayó, cayó con las patas arriba, extendidas en el aire.

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El extraño comportamiento llamó la atención de los vecinos en Huntington Beach, California. Los humanos lo notaron luego: estas aves están intoxicadas.

Resulta que el ganso y la gaviota habían ingerido algunas de las cientos de píldoras descargadas esta semana en Carr Park, un espacio verde de la ciudad con un parque infantil y un pequeño lago de pescadores a unos 4,8 kilómetros de la costa del Pacífico.

Las píldoras, que para las aves del parque pueden haber parecido granos o semillas, aparentemente incluían medicamentos para el corazón, antidepresivos, medicamentos contra la ansiedad e insomnio, precisaron expertos del Centro de Atención de Humedales y Vida Silvestre, una organización, en su página de Facebook.

Nadie parecía saber quién tiró las pastillas o cuándo, informó KCAL/KCBS, afiliada de CNN.

La conducta de estas aves causó sorpresa y luego alarma en los vecinos.

Después de mostrar los síntomas de una sobredosis, el ganso y la gaviota recibieron tratamiento por vía intravenosa y mejoraron poco a poco, informó el personal del centro de incendios forestales. El ganso ya estaba de pie, como mostraba una foto.

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Los expertos advirtieron que podrían haber otras aves que volaron después de ingerir las píldoras e instaron a los vecinos a estar atentos a cualquier comportamiento inusual de las aves en zonas aledañas o no tan cercanas.

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