(CNN) – Un ataque por parte de Israel dañó el Hospital de la Amistad Turco-Palestina, el principal hospital oncológico de Gaza, dijo este lunes a CNN su director, Sobhi Skaik.
El edificio sufrió un impacto directo en la tercera planta, explicó Skaik, causando daños en los suministros de oxígeno y agua, pero sin causar heridas a las personas que se encontraban en su interior.
Un video que circulaba por las redes sociales y que fue geolocalizado por CNN muestra humo saliendo del edificio central del hospital.
“El daño más grave es la ansiedad y el pánico que afligen a los pacientes“, dijo Skaik. “Hoy ha habido gente que ha huido del hospital por lo que han visto”.
CNN solicitó comentarios al Ejército de Israel.
El hospital, ubicado justo al sur de la Ciudad de Gaza, estaba financiado por el Gobierno de Turquía, que expresó su indignación por el ataque en un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores.
“No hay explicación para semejante ataque, a pesar de que toda la información necesaria, incluidas las coordenadas de la institución en cuestión (…) fue compartida con antelación con las autoridades israelíes”, dijeron funcionarios de Ankara, capital de Turquía.
El director Skaik dijo que en el hospital trabajaban 200 personas, que trataban cada año a miles de pacientes de todo el enclave.
Skaik que la comunidad internacional tenía que hacer más para proteger a los más necesitados.
“Esperamos que ningún paciente con cáncer muera en la cama de un hospital como consecuencia de los ataques aéreos“, afirmó.
Ataque a un segundo hospital en Beit Lahiya: por otra parte, el Dr. Ateh Al Kahlout, director del Hospital Indonesio de Beit Lahia, dijo a CNN que el edificio y sus inmediaciones fueron bombardeados cuatro veces a lo largo del día.
El hospital se encuentra en el extremo noreste de Gaza, que ha sufrido algunos de los ataques israelíes más sostenidos desde el 7 de octubre.
Las autoridades de salud ya habían informado de que los equipos médicos no podían entrar ni salir del edificio debido a los daños causados por los ataques aéreos.
El hospital sigue funcionando por debajo de su capacidad máxima, dijo Al Kahlout a CNN, al tiempo que sigue dando cobijo a miles de desplazados.
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