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(CNN Español) – La intención firme de Fernando Villavicencio, candidato a presidente de Ecuador por el partido Movimiento Construye, durante toda su campaña, era acabar con la corrupción política en el país. Villavicencio no abandonó esta postura a pesar de recibir amenazas: “Lo único que pueden hacer es matarme, y con eso liberamos un pueblo entero”, dijo en un evento de campaña a la presidencia de Ecuador.

Villavicencio fue asesinado este 9 de agosto en el norte de Quito durante un acto político. En varios momentos de su campaña electoral, demostró firmeza frente a aquellos que lo amenazaron.

Señaló específicamente como origen de las amenazas a “Fito”, líder de la banda criminal “Los Choneros”, quien se encuentra recluido en la cárcel regional de Guayaquil, ubicada junto a la Penitenciaría del Litoral. Hasta este momento las autoridades no han vinculado a Fito con el asesinato.

Villavicencio afirmó haber recibido una advertencia: “Si sigo refiriéndome a él y a su estructura, ellos atacarán en mi contra o atentarán contra mi vida”. El candidato a presidente de Ecuador denunció varias amenazas en su contra, pero siguió adelante.

“Vengan que aquí estoy, dijeron que me iban a quebrar (…) Que vengan los sicarios, se acabó el tiempo de la amenaza”, espetó en otro acto en el que reafirmó su renuncia a usar chaleco antibalas.

Las denuncias de Villavicencio iban dirigidas a varios grupos mafiosos o criminales que, según él, controlaban el Estado ecuatoriano. En entrevista con el programa de CNN en español “Conclusiones” en mayo, acusó al Cártel de Sinaloa, al Cártel Jalisco Nueva Generación, ambos mexicanos, y también a la mafia albanesa por la situación de Ecuador.

Sin embargo, el candidato presidencial reservó los ataques más enérgicos a la que llamaba “mafia política ecuatoriana”. Ecuador, según él, se había convertido en un “narcoestado”. También decía que apostaba por un gobierno valiente y no violento que atacara la corrupción a través de las Fuerzas Armadas y la Policía. Pero, aclaraba, que esos organismos también debían ser depurados.

Según Villavicencio, la “mafia política” era como una serpiente a la que había que cortarle la cabeza: “… porque si cortamos la cola, la cola se reproduce”, en referencia a las estructuras criminales que estarían sostenidas, según su versión, por políticos ecuatorianos corruptos. Para él, el narcotráfico se había instalado en el Estado ecuatoriano.

La Fiscalía de Ecuador informó este jueves, a través de un comunicado, que en el caso de Villavicencio hay ya seis personas detenidas durante allanamientos efectuados en Quito.

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