Por años, las comunas mineras del país han pedido compensaciones por las actividades de explotación que se han desarrollado en sus zonas. Esta sensación de deuda se buscará reparar a través del nuevo royalty minero, que considera repartir más de US$450 millones adicionales en los municipios mineros y los más vulnerables.
Específicamente, se distribuirán US$225 millones para Gobiernos Regionales, en un fondo para la productividad y el desarrollo, US$55 millones para alrededor de 32 comunas mineras y US$170 millones de dólares para un Fondo de Apoyo para la Equidad Territorial, con el fin de aportar a las comunas más vulnerables del país.
El Gobierno busca que las riquezas del cobre sean compartidas, con énfasis en las regiones de Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Coquimbo, Valparaíso y O’Higgins, que son territorios relacionados directamente con la actividad minera, donde se compensarán externalidades negativas con recursos que beneficiarán a cerca de dos millones de personas.
La recaudación de Royalty Minero comenzaría a llegar a las regiones en el año 2025. Sin embargo, para adelantar recursos, se firmó un protocolo de acuerdo en el que se establecen tres nuevos fondos regionales y comunales.
- Un Fondo Puente de Apoyo a las Regiones y Municipios para 2024, que tendrá el 50% del aporte que estos percibirán con cargo al Royalty minero desde 2025.
- Un Fondo Plurianual para la Seguridad Ciudadana.
- Un Fondo Trianual de Recursos para apalancar proyectos de inversión en infraestructura productiva en las regiones del norte del país.
Desde las regiones mineras ven esto como un avance significativo y trascendental, además de una compensación de las faenas mineras que, en muchas oportunidades, paradójicamente están emplazadas en las comunas más pobres del país.
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