Israel realizó su cuarta elección general en dos años, en la que el sector del primer ministro, Benjamín Netanyahu, sigue a la cabeza, pero sin lograr una fuerza de mayoría parlamentaria sólida.
Al respecto, el analista internacional Raúl Sohr sostuvo en conversación con Última Mirada de CNN Chile que “la grieta que separa a la sociedad israelí es muy difícil de sobreponer y ninguno de los bandos, la centro izquierda, la centro derecha y la extrema derecha, que está muy presente en la alianza de Netanyahu, ha logrado imponerse”.
“Uno de los elementos importantes de las últimas elecciones era el voto de los árabes israelíes que habían sido muy centrales en el avance de la centro izquierda, pero en esta oportunidad no asistieron a votar en las mismas cantidades y esa baja en la votación de los palestinos israelíes, que en general es una votación progresista, va a perjudicar a la centro izquierda y su posibilidad remota de formar un gobierno“, analizó.
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En la misma línea expresó que el partido de Netanyahu “ha obtenido una victoria, su partido es por lejos el más importante, pero no es evidente que pueda formar una colación estable” y “nadie descarta que haya una quinta elección, porque el gobierno que salga de aquí, habrá que ver, puede ser bastante inestable, porque no están las mayorías“.
“Esta fragmentación hace muy difícil el gobierno. Temas como la relación con los palestinos y la inserción de Israel en el conjunto de la región, han quedado bastante postergados en esta elección, en la que el caballo de batalla de la oposición fue la corrupción”, explicó Sohr.
Junto a esto, el destacado comentarista internacional recordó que “Netanyahu esta acusado de haber recibido coimas, la policía ha hecho las acusaciones, y está en medio de un juicio. Muchos pedían su renuncia para que se le pudiera juzgar, pero ha mostrado una capacidad política enorme, lleva 12 años en el gobierno“.
Finalmente, destacó el proceso de vacunación israelí contra el COVID-19: “Ha conseguido una gran publicidad gracias al programa de vacunación, el más importante en términos de porcentaje de la población y esto es una fuente de fortaleza para los gobiernos, pero no fue tan importante como las encuestas señalaban, porque la gente entiende que es un esfuerzo nacional, hay un sistema de salud y no necesariamente el gobernante es el responsable de esto”.
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