El subsecretario de Previsión Social, Claudio Reyes, se refirió al presente de la reforma previsional, a un año de haber sido presentada por el Gobierno. En conversación con CNN Chile, Reyes señaló que durante este período ha habido conversaciones, mesas de expertos y “se ha recibido gente” para abordar el proyecto.
“Tenemos un diálogo, no está congelado, pero sin duda se ha demorado un poco la toma de decisiones para poder llegar a un punto final”, dijo el subsecretario, señalando que a veces las conversaciones se demoran por “factores coyunturales”, como el plebiscito.
El subsecretario expresó que hay un punto fundamental para el Gobierno, que tiene que ver con el incremento del 6% en la cotización por parte de los empleadores y que “es el momento de que lleguen a conclusiones”.
“De parte del Gobierno ha habido flexibilizaciones, ha habido demostraciones de que estamos dispuestos a ceder en algunos de los puntos. Lo que falta ahora es la contrapropuesta, en particular con la distribución del 6%, (es decir), cuánto va a cuentas individuales y cuánto va a solidaridad”, explicó.
Y es que para el Gobierno un aspecto fundamental es que parte importante de la distribución vaya a solidaridad porque “el propósito fundamental de la reforma es mejorar las pensiones, las actuales”. En esa línea, Reyes insistió en que se debe llegar a un acuerdo, pero que “falta voluntad, ceder todos un poco para llegar al resultado que queremos”.
En relación con la propuesta de la oposición para dividir en dos el proyecto, fue enfático en señalar que eso haría “más lento el proceso”.
Finalmente, sobre las indicaciones que el Gobierno presentará al proyecto -que se había dicho serían en octubre-, el subsecretario puntualizó que primero “queremos tener un acuerdo base, no pretendemos hacer una presentación testimonial. La reforma podría avanzar en la Comisión de Trabajo, pero el punto es que queremos que tenga un éxito completo, que se traduzca en una ley no solo en la Cámara, (también) en el Senado”.
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