Lo deportivo no es la única deuda que el club mantiene con sus hinchas durante los últimos años. Las promesas de la construcción de un estadio propio han sido múltiples y se arrastran por años. Federico Valdés, José Yurasek y Carlos Heller pasaron a la cabeza del club con proyectos, pero nunca se concretaron.
“Hay algo que a los hinchas de la U nos falta y es el estadio. Lo necesitamos”, comentó Julián Elfenbein en conversación con el periodista Manuel de Tezanos en el podcast #LaDécada.
Incluso, agregó que “no me puedo morir sin ir a un partido en el estadio de la U”.
Y esta es una inquietud que como él, muchos hinchas azules también sienten. Incluso en un programa de radio sobre el equipo, el animador de Pasapalabra contó que años atrás participó en un concurso para ponerle nombre al deseado recinto deportivo, al que bautizó como “La Caldera Azul”.
¿Y cómo se le ocurrió? Julián contó que se inspiró en los nombres y apodos que tienen otros estadios como La Bombonera (Estadio Alberto J. Armando) de Boca Juniors, La Nueva Olla (Estadio General Pablo Rojas) de Cerro Porteño y El Cilindro de Avellaneda (Estadio Presidente Perón) de Racing Club.
Pero la historia es conocida. La iniciativa quedó solo en eso y hasta hoy no hay planes para un estadio que sea de la U.
Tras la renuncia de Heller a la presidencia de Azul Azul a mediados del 2019, se confirmó lo que ya era un secreto a voces. El nuevo presidente, José Luis Navarrete, aseguraba que el proyecto estaba “congelado”.
“El principal propulsor de esta idea del estadio fue Heller. Hoy él no está y el proyecto está congelado. Nosotros como directorio estamos expuestos a que ese proyecto, que en su momento fue viable, esté congelado por las razones que ya sabemos”, sostuvo en abril del 2019.
Hoy, poco y nada se sabe de ese plan y el club está más preocupado de subir su rendimiento deportivo y dejar atrás estos malos años, que de la construcción un posible recinto deportivo.
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