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Han sido uno de los segmentos más impactados por la pandemia y la crisis económica que la acompaña. En el último año, los jóvenes chilenos han perdido casi 270 mil puestos de trabajo.

Las cifras que se han dado a conocer este último tiempo solo muestran el desalentador panorama. El empleo en los jóvenes de entre 15 y 24 años cayó un 38%, mucho más que la caída de los ocupados a nivel nacional.

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Asimismo, entre los meses de julio y septiembre, la tasa de desempleo juvenil llegó al 26,9%, es decir, 6,2 puntos porcentuales más que hace doce meses.

Esta es una realidad que vive todo el mundo. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), al menos uno de cada seis jóvenes se encuentra sin trabajo producto del COVID-19.

Asimismo, la organización reveló que quienes aún permanecen empleados, han visto recortadas sus horas de trabajo y, por consiguiente, también sus remuneraciones e ingresos.

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La pandemia ha acelerado los cambios en el mundo laboral y la educación dual surge como una manera de mejorar las oportunidades de los jóvenes.

Este es un modelo educativo en el que los estudiantes combinan el aprendizaje en los establecimientos educacionales, con la práctica en empresas o servicios públicos. En Suiza, el 70% de los jóvenes son estudiantes duales.

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