Los indicadores de la economía italiana están aumentando de la mano de una campaña de vacunación contra el COVID-19, sumado a la ayuda del fondo de recuperación. Lo anterior, acompañado además con el activismo del Grupo FS, organismo responsable de gestionar el sistema ferroviario nacional.
Dicho sector, decisivo a nivel mundial sobre todo en pandemia, está comprometido con la implementación de una campaña estratégica que permita la expansión a otros países europeos.
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Bajo el liderazgo del CEO Gianfranco Battisti, la compañía ferroviaria italiana se está convirtiendo en la primera del mundo en competir con los trenes franceses en su mercado nacional. Un gran avance impensado en siglos anteriores.
Junto a esto, a principios de 2022 llegará una joya italiana a los ferrocarriles españoles. Se trata del “Frecciarossa 1000”, tren de alta velocidad considerado entre los mejores del mundo.
“Italia ha vuelto a competir en los trenes de alta velocidad”, dijo Battisti.
Un crecimiento de horizontes hecho posible por la nueva normativa europea en términos de competencia en el sector, pero sobre todo por la visión de Battisti que pone como objetivo del Grupo FS el alcanzar la meta del 20% de ingresos procedentes de los mercados internacionales en un plazo de cinco años.
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Pero lo anterior no sería posible sin el éxito de los resultados obtenidos internamente. Battisti ha conseguido una gestión destacada en las fases más difíciles de la emergencia sanitaria por el COVID-19. De hecho, los principales medios italianos aseguran que su confirmación como representante del grupo por parte del gobierno de Mario Draghi, sea solo una simple formalidad.
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