Los préstamos serán de menor cantidad y dejarán de financiar completamente las viviendas.
A partir de los últimos resultados de una encuesta realizada por los bancos del país, estos establecerán políticas más restrictivas en las instituciones financieras. Estas medidas pondrán más condiciones para los clientes con bajos niveles de ingresos quienes soliciten asistencias de pago, lo que significa que los bancos dejarán de financiar al cien por ciento los créditos hipotecarios que sus clientes solían solicitar.
De acuerdo a los expertos, el temor que existe ante la exigencia de pies más altos para vivienda se explican por un riesgo de generar burbujas inmobiliarias. En el caso de los créditos de consumo, la alta demanda interna de 2012 fue de un 6,6 por ciento, lo que pudo haber provocado esta decisión de los bancos. Pero especialistas en economía consideran que la banca estaría sobrereaccionando ante un calentamiento de la economía.
En tanto, aquellos que cuentan con una buena capacidad de pago no tendrán efectos por estas nuevas restricciones. Este año los bancos ofrecerán nuevas ofertas de financiamiento como alternativa para los que tengan más dificultades para pagar, aunque con montos más bajos en préstamos y mayor ahorro en el caso de los hipotecarios.
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