(CNN) – Novak Djokovic se ha acostumbrado a soportar los abucheos de los espectadores cuando juega al tenis. Junto a Nick Kyrgios, es el enemigo público número uno entre varios fanáticos.
Y el jueves, durante el cuarto set de su partido de segunda ronda contra Enzo Couacaud en el Abierto de Australia, la situación se desbordó cuando se quejó con el juez de silla sobre la provocación que estaba recibiendo de un grupo de fanáticos en particular.
Los saques de Djokovic se vieron constantemente perturbados por gritos mientras los fanáticos de la multitud se burlaban de él.
“El tipo está borracho hasta la locura”, se podía escuchar a Djokovic enojado diciéndole al juez de silla Fergus Murphy mientras señalaba a los fanáticos en cuestión.
“Desde el primer punto, me ha estado provocando. No está aquí para ver tenis, solo quiere meterse en mi cabeza, lo escuchaste al menos 10 veces, yo lo escuché 50. ¿Qué vas a hacer al respecto? Sáquenlo del estadio”. dijo el serbio
Los fans en cuestión, vestidos con ropa del clásico “¿Dónde está Waldo?” a rayas rojas y blancas y fueron vistos siendo escoltados fuera del estadio al final del juego.
La semana pasada, Craig Tiley, director de Tennis Australia, los organizadores del Abierto de Australia, le dijo al Herald Sun de Australia que las personas que se burlan irracionalmente de Djokovic serían expulsadas de los lugares: “Si interrumpen el disfrute de cualquier otra persona, boom, están fuera”.
“No los queremos en el sitio… Pueden mantenerse alejados o los echaremos”, advirtió.
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Laura Robson, ex número 1 británica, dijo que es comprensible que Djokovic estuviera “frustrado” con el trato que estaba recibiendo de la multitud.
“Creo que todos estarían un poco frustrados con ese nivel de abucheos”, dijo Robson a Amanda Davies de CNN Sport . “Y en un estadio como Rod Laver, puedes escuchar todo cuando estás en la cancha.
“No hay una gran distancia entre las personas en las primeras dos filas y la línea de fondo. Y eso era con lo que estaba lidiando punto tras punto y, finalmente, pasó casi hasta el final del partido antes de que fueran expulsados, pero puedes entender la frustración”.
El número cuatro del mundo tuvo que luchar contra los gritos de la multitud, contra el francés Enzo Couacaud y también con una lesión persistente para salir adelante con la victoria por 6-1, 6-7 (5-7), 6-2, 6-0.
Ha estado luchando contra una lesión en el tendón de la corva sufrida la semana pasada y, durante el segundo set, la estrella serbia tuvo un tiempo de espera médico en el vestuario para recibir tratamiento en el área del problema.
A pesar de perder el segundo set, el jugador de 35 años logró pasar los últimos dos sets sin muchos problemas en la cancha, y la mayoría de sus problemas provinieron de los fanáticos.
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