El equipo local encontró chocó ante la muralla que representó el arquero Ochoa.
La selección de Brasil no pudo imponer ante México su condición de local y favorito absoluto del Mundial. El equipo dirigido por Luis Felipe Scolari empató sin goles ante la selección azteca, que inclusive logró dominar pasajes del encuentro y tuvo la opción de arruinar completamente la fiesta en la ciudad de Fortaleza.
Aunque la ofensiva de México no estuvo ausente, la gran figura del encuentro fue el portero Guillermo Ochoa, quien tapó tres claras ocasiones que el Scratch logró armar.
El equipo mexicano no temió al peso de la historia, ni tener a toda la parcialidad en contra, ya que en más de una ocasión inquietó al portero Julio César.
Con un Neymar sin lucidez en el finiquito, y una escuadra brasileña totalmente sorprendida ante el sólido esquema azteca, Brasil cedió los primeros puntos del torneo y comparte el primer lugar con un México que solo mira desde atrás por la diferencia de gol.
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