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Cortó una mala racha de dos meses sin convertir.
En una nueva edición del clásico en el que su equipo enfrentó al Newcastle, el delantero inglés Jermain Defoe concretó un golazo en favor del Sunderland. Tras un pase largo de Steven Fletcher, el atacante demostró una gran técnico dándole de lleno al balón con una espectacular volea.
No obstante, lo más llamativo es que después del golazo, el jugador lloró en el campo de juego. Defoe no había logrado marcar un gol en casi dos meses, por lo que le costó contener sus emociones al abandonar el campo durante el entretiempo.
Además, el golazo terminó siendo trascendental, ya que el marcador final fue 1 a 0 en favor de Sunderland.
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