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Era una pelea de ensueño para que Conor McGregor volviera en gloria y majestad al octágono de la UFC o su contrincante alcanzara, como finalmente lo hizo, un potente invicto de 27-0, pero todo terminó en un escándalo de proporciones impensadas.

Khabib Nurmagomedov le dio una verdadera paliza en cuatro asaltos al irlandés y mantuvo su título de peso ligero en la máxima competencia de MMA, pero no contento con eso, hizo todo un show luego que terminara el combate y empañó completamente su triunfo.

Luego de someter inapelablemente a McGregor, el ruso no encontró nada mejor que saltar la reja e ir directamente a golpear a uno de los colaboradores del irlandés generando un verdadero bochorno que solo pudo ser frenado gracias a la intervención de la seguridad del recinto y la policía metropolitana de Las Vegas.

Esto porque también se vio involucrada gente del público, lo que obligó a la organización a que ambos luchadores -luego de varios minutos de espera- hicieran abandono del octágono bajo un fuerte resguardo y por separado.

A tal punto que no se le entregó de inmediato el cinturón a Khabib, quien insistentememte reclamó “denme el cinturón y después llévenme preso”.

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