La participación de Chile en los Juegos Panamericanos Santiago 2023 tendrá un matiz especial gracias a los deportistas nacidos en otros países que serán parte del equipo nacional.
Una campaña liderada por la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) en Chile y el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv) busca visibilizar las contribuciones deportivas de jóvenes que vienen desde otras latitudes a nuestro país, “demostrando así cómo con una meta positiva, pueden generarse grandes aportes para las comunidades que les han acogido”.
La campaña está disponible en el sitio La Camiseta por Chile, donde recoge los testimonios de la karateca ucraniana, Anastasiia Velozo, de la escaladora Alejandra Contreras y de los luchadores venezolanos Virginia Jiménez y Eduardo Bernal, quienes relatan cómo llegaron a Chile y cómo poco a poco fueron cumpliendo sus sueños de desarrollarse personal y deportivamente.
Las historias de la campaña
“Ser chilena ahora es un orgullo para mí, es un país muy lindo, con una cultura diferente y preciosa, con una naturaleza maravillosa y simplemente por eso, yo ya estaría orgullosa. Es un orgullo representar su bandera y ponerme el traje del Team Chile”, dice Velozo, la joven karateca nacionalizada chilena, cuya historia es parte de la campaña.
Nacida en Ucrania, llegó a la cima deportiva en 2017, cuando se coronó Campeona Europea de Karate. “Comencé a entrenar con la selección cuando empezó la guerra. Era muy difícil estar acá tan lejos. Yo despertaba durante la noche para ver las noticias y asegurarme que mi familia estaba viva. Durante dos semanas estuve en el teléfono viendo cómo ayudar, con mucha preocupación”, cuenta la joven.
Otra de las deportistas ya instalada en la Villa Olímpica, preparándose para su competencia, es la escaladora Alejandra Contreras.
De origen chileno, pero nacida y criada en Venezuela, arribó a suelo nacional luego de que su familia se viera obligada a emigrar por la situación que atravesaba el país. “La escalada te enfrenta cada día a un nuevo reto, siempre hay algo por aprender y conocer. La meta es llegar a la cima del muro ocupando todos tus conocimientos, capacidades y habilidades. Así como en la escalada, en la vida no hay un solo camino“, dice.
“Hoy, tras crecer afuera, he vuelto a Chile para iniciar una nueva vida y contribuir lo más posible como deportista a mi comunidad”, agrega.
Sobre su participación en los Juegos, Alejandra desyaca que representar a Chile la llena de orgullo e ilusión: “Siento que es mi país y que es una linda manera de retribuir cómo nos ha acogido a mí y a mi familia desde que llegamos. Crecí escuchando a mi padre hablar sobre Chile, pero una vez acá la experiencia ha sido enriquecedora tanto en lo personal como en lo deportivo. Por eso me he esforzado en cada entrenamiento, para dar todo en cada una de las competencias que se vienen (…), creo que competir en casa será una experiencia única”.
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También competirán por Chile los luchadores nacidos en Venezuela, Virginia Jiménez y Eduardo Bernal: “Le doy muchas gracias al equipo nacional de lucha porque me recibieron como una más. Desde el día uno me siento en familia. También voy a luchar en nombre de esos atletas extranjeros que buscan la oportunidad de representar a países que los han acogido”, menciona Virginia, quien, tras llegar a Chile, estuvo seis años fuera de competencias, concentrándose en su integración al país.
Eduardo Bernal concuerda en que el camino no fue fácil. Trabajó como copero, maestro y administrador de un restaurante de sushi; luego en una empresa de maquinaria pesada; en una empresa seguridad administrada por excompañeros de lucha; y finalmente en una importadora de materiales de construcción.
Este camino de esfuerzo y perseverancia culminó con su nacionalización, lo que le permitirá competir por el Team Chile: “Ha sido un camino muy largo, pero con la mira puesta en el objetivo. Quiero competir por este lindo país y darle alegrías. También quiero ser parte de la historia chilena, para que después de mi carrera como deportista, seguir aportando los conocimientos adquiridos a futuras generaciones en el sur de Chile”, asegura.
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