A tan solo dos días del arranque de Wimbledon, Matteo Berrettini (11°) y Marin Cilic (17°) tuvieron que ser bajas del cuadro principal luego que se supiera que los jugadores dieron positivo a COVID-19. El italiano enfrentaba a la raqueta nacional, Cristian Garín (43°), mientras que el croata se iba a medir con Mackenzie McDonald (55°).
Bajo ese contexto, es que la tenista francesa Alizé Cornet (37°) reveló que una situación similar se vivió en Roland Garros, solamente que un acuerdo entre los mismos jugadores impidió que se supiera de los contagios.
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“Lo que nadie sabe es que en París hubo una auténtica epidemia de coronavirus“, declaró Cornet a L’Equipe, donde los “tenistas nos pusimos de acuerdo para no hacernos test“.
“Hubo grandes jugadores implicados y me preocupa lo que puede generar esa información cuando se haga pública”, sostuvo la francesa. “Cuando vez que todo el resto del circuito está enfermo, con los mismos síntomas, como tos y dolor de garganta, pues te puedes hacer una idea”.
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Agregando que “decidimos no hacernos test para no meternos en problemas. Vi a compañeras con mascarillas en todas las zonas comunes porque estaban seguras de tenerlo y tuvieron un espíritu cívico”.
Hasta el momento ni Roland Garros o las autoridades frances se han pronunciado ante la declaración, al igual que la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) o la Asociación de Tenis Femenina (WTA, por sus sigles en inglés).
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