Además del característico estilo urbano que despliegan sus producciones, Trinidad Riveros (22) y Gianluca Abarza (22) tienen más en común de lo que la gente cree.
Los dos provienen de familias allegadas a la industria (un tío de Trinidad tuvo de productor a Cerati y el papá de Gianluca fue parte de una banda de rock), comenzaron sus coqueteos con la creación musical mientras estaban en enseñanza media y, a la vez, se catapultaron en la escena durante 2017, con los respectivos éxitos Mi Only One y Siempre Triste.
Fue precisamente aquel año en que cruzaron caminos, pues “Gian” -como le dicen sus cercanos- produjo el single debut de la joven que, en aquel entonces, preferiría abandonar el tradicional nicho católico de su nombre de pila para convertirse en Princesa Alba.
Ya sean idolatrados por los universitarios o cuestionados por la Generación X, hoy sus teléfonos no paran de sonar. Bueno, más bien los de sus managers, puesto que, aunque la autogestión era la única luz a través de la que se guiaban al comienzo de sus carreras, hoy asisten a entrevistas con encargados de prensa y cuentan con un equipo de asesores en sus espaldas. Y es que el futuro de sus carreras luce prometedor.
Tras el lanzamiento de Summer Love, canción escrita por los dos junto al también veinteañero Francisco Victoria, las fechas de sus agendas se han mantenido constantemente copadas.
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Princesa Alba se ha posicionado como uno de los platos fuertes en las bienvenidas mechonas de la PUC, U. de Chile, Usach y UTFSM de Valparaíso. Gianluca, por su parte, brilla como uno de los artistas chilenos emergentes más esperados en la parrilla de Lollapalooza 2019.
Eso sí, quiere dejar algo en claro: contrario a como muchas veces se le ha definido en el pasado, no es un cantante de trap. “Me cuesta un poco definir mi estilo, así como englobarlo y decir ‘soy esto’, porque me influencian muchas cosas, entonces yo creo que lo que hago es más particular que un género“, afirma.
Trinidad también se ve reflejada en esas afirmaciones: “Es lo mismo que dice el Gian. El trap, en general, se mueve en las fronteras de muchos estilos, pero creo que mi música se mueve más en el pop“, acota.
—¿Cómo se cimenta la carrera de un artista en Chile a partir de la autogestión?
Trinidad: Al principio es duro. Me costó acostumbrarme a que yo tenía que gestionar mis fechas, buscármelas por mí misma o conseguir plata para un video. Y también, siendo músico en Chile, la gente tiende a criticar mucho, entonces tenís que ser “fuerte” para seguir siendo tú y que no te afecten los comentarios. Pero eso. Sería bacán que hubiesen más fondos de cultura para que ser músico independiente sea más fácil y uno no tenga que depender sí o sí de las multinacionales.
Gianluca: Es complicado hacer cualquier cosa independiente, tipo un emprendimiento. Y tampoco es tan complicado como lo hacen ver de repente, como que es imposible y que no hay que dedicarse a eso, porque no lo vái a poder hacer. En verdad, si tenís las ganas y la convicción y erís inteligente, yo creo que se puede llevar todo el rato. O sea, también hay cosas que aquí son terribles, como los malos tratos o que no te validen por artista ya por el sólo hecho de ser un artista, sino que uno tiene que ir validándose en el tiempo y nunca terminar de hacerlo. A mí hay gente que en los mismos eventos me dice ‘¿y quién soi tú?’ y es como ‘estoy haciendo mi pega, respétame’. Pero también hay cosas que uno tiene a favor, como que hay un montón de cosas que acá no se conocen y que uno puede hacer y es nuevo. Hay muchos espacios y eso es una motivación. Inconscientemente, igual aportái a la cultura y yo siento que Chile igual necesita trabajar mucho más el tema del arte y la cultura. Que le enseñen más a los niños.
—Gianluca, al comienzo eras un artista 100% independiente y ahora estás en Quemasucabeza, un sello que ha contado en su catálogo con artistas nacionales de la talla de Javiera Mena y Gepe. ¿Fue drástico ajustarse a un sello?
Gianluca: No. O sea, la profesionalización, entre comillas, de lo que yo hago, se ha ido dando desde antes de pensar siquiera estar en Quemasucabeza. Me gusta mucho, porque es un sello independiente donde yo también tomo las decisiones, entonces igual tiene que ver con un intermedio entre trabajar solo y trabajar con una major, que no es lo que quiero ahora, porque se meten mucho y tienen una visión de las carreras que te llevan hacia un camino que es muy mainstream. Y, en verdad, no es lo que me interesa a mí, sino hacer las cosas como más a mí pinta. Justo llegó la posibilidad de trabajar con ellos y es un apoyo súper grande para poder enfocarme más en la música. Y nada, también las cosas van sucediendo según se necesitan. A mí me gusta ser artista independiente y estando en un sello independiente sigo siéndolo.
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—Trinidad, ¿cómo ha sido tu experiencia siendo la única artista de Persona, un sello emergente?
Trinidad: En un momento, me hacían el management y el booking. Hace poquito es mi sello discográfico.
—Has organizado fiestas musicales con políticas anti acoso. Cuéntame de eso.
Trinidad: Yo soy feminista y siempre voy a velar por procurar que todos los espacios en los que trabaje sean mujeres friendly. Mis canciones también versan sobre el feminismo, entonces siento que tenís que crear un mundo que sea adecuado para el contenido que estái generando y que las fiestas también vayan en esa línea.
—Gianluca, ¿crees que se puede ser feminista y ser hombre? ¿O se puede, más bien, ayudar a la causa desde los privilegios?
Gianluca: Obvio que se puede ser feminista y ser hombre. Yo creo que todos deberíamos ser feministas, entonces como que siento que es una cuestión que tiene que ver más con el mundo que sólo con las mujeres. De repente siento que eso ayuda a que se dividan más las cosas, como no sé, las mujeres feministas y los hombres no. Todos deberían ser feministas y son causas que tienen que ver más con la evolución de la sociedad. Yo igual siento que, mi mensaje y lo que hago, tiene que ver con lo que soy yo y yo tengo como el feminismo. Yo siento que todos somos iguales, entonces no siento que debería haber un motivo por el que a la Trini le digan más cosas por usar autotune que a mí o que a Drefquila. En verdad todos estamos en igualdad de condiciones.
Amor de verano
Summer Love fue el puntapié inicial de lo que augura ser un gran año tanto para Princesa Alba como Gianluca. El video oficial de la canción, dirigido por Camila Suazo, fue estrenado el 3 de enero y tanto las reproducciones en YouTube como los streamings en Spotify han sobrepasado los dos millones en menos de cuatro meses.
Además, se volvió parte del soundtrack estival de muchos chilenos, convirtiéndose en algo así como la oda moderna al romance veraniego como lo hizo en algún momento el clásico noventero Mi loco amor de verano de Andrés de León.
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Gian y Princesa se conocieron en 2017. Aunque ninguno de los dos tiene recuerdos lúcidos de cómo fue aquel primer encuentro, él intentó devolverlo a la vida.
“De lo único que me acuerdo es que la saludé afuera de una tocata y ahí hablamos un poco. Y después por Instagram. En ese tiempo no me hablaba mucha gente para que le produjera cosas. Entonces igual era interesante, porque el acercamiento que tenía la Trini a la música, en cuanto a estética y sonido, se acercaba harto a lo que yo estaba haciendo. Era algo interesante para mí de trabajar”, recuerda.
—¿En qué momento escucharon el uno del otro por primera vez?
Trinidad: Yo era fan del Gian y lo iba a ver a sus tocatas. Y eso, un día le escribí un mensaje…
Gianluca: En verdad, era una tocata…
Trinidad: Pero no nos saludamos.
Gianluca: Sí po, tú me hablaste en una tocata y ahí me dijiste que queríai hacer música.
Trinidad: ¿De verdad? No me acuerdo.
Gianluca: Luego hablamos como por Instagram o algo así, pero primero la conocí en persona después de una tocata.
—¿En una fiesta?
Gianluca: Sí, en el mítico club Greta.
Trinidad: Ah, no sabía, no me acordaba que habíamos conversado…
Gianluca: Pero obvio que te acordái, si tú también hay contado esa historia.
Trinidad: No, la historia era que yo te había hablado por Instagram y de ahí…
Gianluca: No, en persona. Y me dijiste que queríai que te hiciera famosa. eso me lo dijiste en persona.
—Summer Love refleja la historia un romance veraniego que tiene lugar en la capital. ¿Cómo surgió el concepto?
Trinidad: Quería hacer un hit del verano y me molestaba el concepto de la playa, porque está súper repetido y tampoco es universal. No todos van a la playa, mucha gente se queda en Santiago. A mí me pasaba mucho en los veranos que siempre me quedaba en Santiago y siempre me hizo ruido ese concepto del verano perfecto en la playa. También me gusta mucho la ciudad en verano, porque está vacía. Santiago es entretenido, hay muchas cosas que hacer y no hay taco, no hay gente y uno está más relajado.
—Tanto la letra como las melodías destacan por ser más mainstream y bailable que sus trabajos previos. ¿Mentalizaron, mientras la componían y producían, que iba a volverse un hit veraniego?
Trinidad: Yo trato de trabajar en pos de llegar a que a la gente le guste. A mí igual me gusta que las cosas sean masivas. En un principio, me gustaba más que mis cosas fueran caseras y low profile, pero ahora me gusta cada vez más que la gente entienda el concepto de mi música. Yo quería que fuese un hit, y no sé si se puede llamar hit, pero cumplió con las metas que me propuse.
—La canción fue escrita por los ustedes dos junto a Francisco Victoria. ¿Cómo fue ese proceso?
Trinidad: Yo la escribí en mi pieza como en octubre o noviembre. O sea, igual varió caleta. Mis canciones siempre varían muchísimo, pero la idea principal siempre estuvo y el coro también siempre estuvo. Siempre fue “rodeada de concreto’”. Y le mandé el demo al Gian por WhatsApp. Él dijo: ‘Sí, ya, apaño’. Después, con Francisco empezamos a producirla… pero todo muy por WhatsApp, y ahí el Gian escribió su parte.
—¿Cómo proyectabas el video en tu cabeza antes de darle vida?
Trinidad: Me gustan mucho las imágenes y escribir a partir de imágenes. Yo quería que fuese harto cemento, harta ciudad también. Eso también se trabajó con mis compañeras: la Camila Suazo, que fue la directora, y también hizo Mi Only One.
—¿Cómo fue el proceso de grabar el videoclip juntos?
Trinidad: Lo grabamos con mi equipo de siempre, que son mis compañeros de la U. Con más presupuesto, eso sí, porque, a partir de mis tocatas, he generado más ingresos y puedo costear más equipos y pagarle mejor a mis compañeros (risas). Antes no les pagaba nada. Todos somos de la misma edad, entonces es entretenido trabajar de par a par. Las niñas que salen en mis videos son amigas y compañeras, y los que trabajan atrás también son amigos y compañeros.
Gianluca: Fue bacán. Me gustaron las locaciones y fue entretenido igual. No había grabado un video así como… como romántico (ambos ríen), entonces habían ciertas cosas que no había hecho y eso. Entretenido.
Trinidad: Era chistoso actuar, porque no somos actores. (A Gianluca) Igual a ti te salía mejor.
—¿Van a tener más colaboraciones a futuro?
Trinidad: ¡Gian, contesta!
Gianluca: Ehh… no sabemos así como sí o no, pero yo creo que sí. En algún momento puede darse. Igual lo hemos hablado. Funcionan bien nuestras voces juntas en las canciones y nos gusta trabajar juntos, entonces yo creo que lo más probable es que sí.
—Gianluca, en el marco de Lollapalooza, ¿cómo ha sido esta ola mediática de ser un artista chileno y estar en un festival de esta índole?
Gianluca: Igual hay hartos artistas chilenos que están en Lolla y yo creo que también deberían tener más visibilidad en el festival, como en Brasil o en Argentina, donde hay headliners que son brasileños o argentinos, respectivamente, y acá nunca ha habido un headliner chileno. Ojalá con el tiempo eso cambie. Para la presentación en vivo, vamos a hacer varias cosas que no hemos hecho nunca. Vamos a tocar con baterista y nada, hartas sorpresas para el show. Van a ir invitados especiales, entonces va a estar bueno.
—¿A ti te gustaría ir a Lollapalooza, Trini?
Trinidad: Obviamente me gustaría estar en más festivales y más cosas, pero cada cosa a su tiempo.
—De aquí a cinco años más, ¿cómo les gustaría verse?
Trinidad: No sé, en cinco años más, me imagino en la música. Me imagino cumpliendo todas las metas que me propongo. Llegar a festivales más grandes, llegar a festivales internacionales, sacar más discos y seguir pasándolo bien con lo que amo, que es la música… y los videos (risas).
Gianluca: Nada, ojalá estar bien y haciendo música viajando por el mundo. Nunca he viajado fuera de Chile, entonces quiero hacerlo pronto. También he pensado salir bien, ir a festivales afuera, hacer giras. Al final, igual son metas que, tanto la Trini, yo y toda la escena va a seguir explotando. Yo creo que el otro año también va a haber una internacionalización fuerte de todo el gremio urbano.
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