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El vicepresidente de la Confederación Nacional de Funcionarias y Funcionarios de Salud Municipal (Confusam), Esteban Maturana, se refirió a la primera muerte en nuestro país de una trabajadora de la salud por COVID-19 y cuestionó algunas de las medidas implementadas por el gobierno para combatir la pandemia.

La muerte de Lorena (quien desempeñaba labores administrativas en un centro de salud en Gorbea) es un llamado de alerta extrema“, sostuvo el dirigente en entrevista con CHV Noticias.

En la misma línea, destacó que “necesitamos con urgencia que todo el personal de salud tenga los equipos de protección que se requieren para hacer la labor, somos la primera línea, sin nosotros, esto sería un locura”.

Además, aseguró que “tenemos más de 200 funcionarios (de la salud) contagiados por coronavirus, algunos estas hospitalizados y otros están en sus casas”.

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Consultado por las medidas que han llevado adelante desde el gobierno y los planes de comenzar a reactivar progresivamente el comercio, señalan que “tenemos la certeza de que el peak de contagios aún no ha llegado, estamos en la fase ascendente de la curva y es en mayo que debiéramos estar más complicados en el país”.

“El llamado es a que bajemos estas lógicas de la ‘nueva normalidad’ y ‘retorno seguro’, que es muy útil para los negocios, pero para la seguridad de las personas es un riesgo tremendo”, reflexionó.

Es por lo anterior que advirtió que “la economía se puede recuperar, las vidas no se recuperan“.

“Si nos ponemos en un escenario muy crítico, en el que el nivel de contagio sea similar al de los países europeos o de EE.UU., nos vamos a ver bastante apretados en materia de camas hospitalarias, ventiladores y por supuesto en la dotación de personal”, concluyó.

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