Los ritmos de la sociedad contemporánea dificultan mantener horarios y rutinas saludables. Almorzamos cuando tenemos tiempo, no hacemos ejercicios recurrentemente y nos vamos a dormir al terminar tareas del hogar, el trabajo o cuando el sueño nos atrapa después de horas frente al televisor.

Esto genera un trastorno llamado “jetlag social” o, según su nombre científico, “Fase Retrasada del Sueño”, que afecta a aquellos que se duermen y despiertan más tarde.

Es un desorden del ciclo circadiano que se da por falta a la exposición de luz solar en las mañanas. Es muy habitual en jóvenes que se quedan despiertos hasta tarde mirando el celular, en la consola o viendo series y películas, y que los fines de semana se despiertan aún más tarde que en la semana. Muchas veces se confunde con insomnio, por lo que a veces es mal manejado con inductores de sueño o ansiolíticos”, explica Pablo Guzmán, neurólogo especialista en sueño de Clínica Somno. 

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Según estudios realizados en el Instituto de Psicología Médica de la Universidad Ludwig-Maximilian de Múnich (Alemania), los noctámbulos, y en particular los que se levantan muy tarde, aumentan el riesgo de problemas de salud respecto a quienes prefieren madrugar, quedando más expuestos a padecer enfermedades al corazón, problemas metabólicos y de tipo cerebrovasculares.

A su vez, se ha demostrado un incremento en las muertes prematuras, trastornos psicológicos y enfermedades respiratorias de quienes no madrugan.

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Así mismo, jóvenes y no tan jóvenes buscan recuperar el sueño perdido en la semana quedándose más tiempo en la cama el sábado y el domingo: “Esto es absolutamente falso. Con eso lo único que se logra es desajustar nuestro marcapaso biológico (ciclo circadiano) para toda la semana”, agrega el especialista de Clínica Somno.

¿Alarma para el fin de semana?

Los beneficios de aumentar la exposición solar en las mañanas, abre la pregunta sobre cómo enfrentar el despertar los fines de semana. ¿Es necesario usar la molesta alarma semanal para sincronizar las horas de sueño del sábado y domingo? “No se recomienda usar alarmas en los días libres, pero sí el uso de un visillo en las ventanas que deje entrar la luz solar, y evitar así los blackout que no permiten que entre luz natural”. manifestó el neurólogo Pablo Guzmán.

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Las buenas noticias para quienes se quedan despiertos hasta tarde, es que esta costumbre puede ser tratada de manera no farmacológica, con tratamientos como la luminoterapia o cronoterapia (en este último se va corriendo el horario de sueño para hacer calzar la hora de acostarse con la mayor somnolencia posible).

Por tanto, métodos para tratar el problema existen varios, lo importante es poder llegar a tener un buen sueño y un descanso reparador, no sólo para no tener somnolencia durante el día, sino que también para ayudar a la consolidación de la memoria y mantener activos nuestros sentidos.

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