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En una nueva edición de Última Mirada, Luis Astudillo, alcalde de la comuna de Pedro Aguirre Cerda, conversó respecto al aumento de la delincuencia en Chile y su influencia en la percepción del temor ciudadano. “Todo el mundo se queja de la inmigración y atribuye que son los migrantes quienes están cometiendo delitos. Y si uno se fija en las estadísticas, no es así. La inmigración enseñó malas prácticas. O sea, los delincuentes criollos rescataron lo peor de los delincuentes foráneos y empezaron a nivelar hacia arriba en niveles de violencia”.

Las secuelas de la delincuencia en Pedro Aguirre Cerda

Astudillo ejemplificó la situación local de su comuna: “Hay varios sectores donde hemos visto que el crimen organizado y el narcotráfico han creado un ambiente de terror. Yo lo comparo mucho con lo que son los terroristas. Tienen una estructura piramidal, soldados, propiedades, herramientas, armas. Ahora, lo que los diferencia es que los terroristas tienen un fin político o religioso y estos narcoterroristas vienen por un bienestar personal y por el lucro, principalmente”.

En esa misma línea, el alcalde explicó que “en comunas como Pedro Aguirre Cerda y la mayoría de las que pertenecen a la Fiscalía Metropolitana Sur, donde se decomisa más del 77% de la droga de la Región Metropolitana, se está viviendo casi un estado de excepción de facto. A las seis de la tarde están todos en sus casas; cuando se escuchan las balaceras, todo el mundo se va a parapetar”, señaló. “El crimen organizado está imponiendo su ley y atentando contra el Estado de derecho”.

El actuar del Gobierno 

La autoridad reparó, además, en que “a pesar de que este Gobierno no ha hecho todo lo que está a su alcance, ha manifestado buena voluntad de poder avanzar en estas materias. Es el Gobierno que más dinero está destinando para el tema de seguridad; se movilizó a los militares a la frontera y se bajó en un 55% la migración ilegal. Les costó hacer el estado de excepción en el sur, pero también lo hicieron”.

¿Qué es lo que falta, entonces? “La visión de nosotros, los alcaldes y alcaldesas. Yo conozco la comuna como la palma de mi mano. Nosotros sabemos todo. Sabemos dónde se trafica, cómo se llaman los que trafican“.

Y reparó en las claves para enfrentar la situación: “Podemos ser un aporte al desarrollo de los planes; pero, lamentablemente, todavía se siguen tomando las decisiones desde el Ministerio del Interior. Se había iniciado un trabajo bien interesante con el subsecretario de Prevención del Delito (Manuel Monsalve), pero este quedó truncado”, finalizó.

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