Nissan anunció el cierre de su planta en Barcelona, lo que generó diversas protestas por parte de sus trabajadores. El grupo japonés va a cerrar a más tardar en diciembre su sucursal en la ciudad española, dejando sin empleo a más de 3 mil personas.
La información fue entregada al gobierno de España, a la Generalitat y a los sindicatos, descartando una propuesta de modernización por falta de viabilidad.
El director ejecutivo de Nissan, Makoto Ushida, aseguró que la compañía todavía tiene que consultar con algunas partes interesadas.
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Los trabajadores, en tanto, quemaron neumáticos en el exterior de esta fábrica situada en la zona franca de Barcelona.
La rebaja en la capacidad de producción busca una mejora en la eficiencia después de que Nissan perdiera el año pasado USD$6.200 millones, y se enmarca en la nueva estrategia que anunció la compañía junto a Renault y Mitsubishi.
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