El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, llevaría una leve ventaja sobre su rival más cercano, Beni Gantz, con el 20% de los votos escrutados hasta ahora. De todas formas la contienda es estrecha y algunos expertos creen que aún podrían faltar un par de días para poder destrabar el empate técnico.
Ambos candidatos se dieron por ganadores al conocerse las primeras encuestas a boca de urna. La diferencia política entre ambos es sutil. De acuerdo al alto funcionario palestino Nabil Shaat, las elecciones ya no representan esperanza para ellos porque “ahora hay una derecha conservadora, una extrema derecha y una extrema derecha radical. Realmente no hay una izquierda en Israel“.
De hecho, ambos candidato respaldan la ocupación palestina y esto no fue tema de debate durante la campaña. Gantz sí se ha mostrado más moderado, pero la disputa estuvo centrada en quién ofrecía mayor protección a los israelíes.
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Esta elección también es vista como un referendo sobre la figura de Netanyahu, quien está siendo acusado de soborno, fraudes y abuso de confianza, denuncias que presentó el fiscal general de Israel apenas 40 días antes de la votación.
El primer ministro se la jugó durante los últimos días en los votantes más a la derecha y prometió que si gana anexará los asentamientos judíos en Cisjordania considerados ilegales por la ONU.
El gobierno de Trump, en tanto, ha sido un aliado importante en la campaña de Netanyahu, respaldándolo personalmente. De hecho, el mandatario tiene más aprobación en Israel que en Estados Unidos.
Este lunes el mandatario estadounidense calificó a la Guardia Revolucionaria de Irán como una organización terrorista, lo que fue agradecido por Netanyahu, quien destacó que la petición fue hecha por él.
Thank you, President @realDonaldTrump for your decision to designate the Islamic revolutionary guards as a terrorist organization.
Once again you are keeping the world safe from Iran aggression and terrorism.— Benjamin Netanyahu (@netanyahu) April 8, 2019
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