Luego que el propio Kaiser asegurara que "sin dudas" apoyaría un nuevo derrocamiento de un Gobierno, parlamentarios oficialistas le solicitaron el mismo compromiso democrático que él le exige al Partido Comunista.
— “Si se repitieran las mismas circunstancias, ¿usted apoyaría un nuevo Golpe?”
— “Sin duda. Absolutamente. Con todas las consecuencias.”
De esta forma, el diputado y candidato presidencial, Johannes Kaiser, se refirió en una entrevista con Mega a la posibilidad que se produjera un nuevo Golpe de Estado en Chile, tal como el que se produjo con el bombardeo a La Moneda en 1973.
Sus dichos generaron repercusión, particularmente en el oficialismo, desde donde criticaron duramente al abanderado del Partido Nacional Libertario.
Esto, a raíz que después de las primarias oficialistas, Kaiser había señalado que “esperamos que el Partido Comunista se comprometa, efectivamente, a respetar los principios constitucionales y democráticos que no ha respetado en el pasado”.
Las reacciones a los dichos de Kaiser
Respecto a los recientes dichos del candidato libertario, el diputado Tomás de Rementería (PS) señaló que “tienen que ser muy patudos de andar pidiendo credenciales democráticas, cuando Kast declara que estaría orgulloso de tener el voto de Pinochet y Labbé habla de repetir el golpe de Estado. Demócratas de cartón“.
Por su parte, la diputada Lorena Fries (FA) aseguró: “La audacia de tildar a Jeannette Jara de antidemocrática, cuando son los Matthei, Kast y Kaiser quienes han defendido el golpe de Estado y a Pinochet (aunque a veces lo escondan o finjan demencia)”.
A su vez, la diputada Carmen Hertz (PC) indicó que Kaiser “señala no ‘dudar’ un instante en un nuevo golpe de estado, no duda en transformar a Chile en un reducto del terror, no duda en asesinar y masacrar a cientos de personas, no duda en hacer desaparecer, prisioneros políticos lanzándonos al mar o enterrándolos en fosas clandestinas, no duda en degollar opositores políticos, no duda en quemar vivos a jóvenes manifestantes, no duda en crear decenas de campos de concentración y exterminio a lo largo del país, éste es el ‘plan de acción’ de la derecha en Chile”.