La hija menor del dictador, Jacqueline Pinochet, acusó a su hermano mayor de apropiación indebida de inmuebles, sumado a malos tratos en su contra.
La semana pasada, se declaró como admisible una querella presentada por la hija menor del dictador Augusto Pinochet ante el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago.
Según lo señalado por La Tercera, Jacqueline Pinochet Hiriart acusó a uno de sus hermanos mayores, Marco Antonio Pinochet, de apropiación indebida de inmuebles que estaban a nombre de su padre y que formarían parte de la herencia del clan familiar.
A esto se suma que la hija acusa que ha sufrido “maltrato habitual“, una denuncia comúnmente vinculada a delitos de violencia intrafamiliar.
En el texto presentado ante el tribunal, además se detalla que dentro de los bienes de la comunidad hereditaria se consideran ocho inmuebles, entre casas en la playa, un departamento en Vitacura, una casa en Santo Domingo, y la parcela de El Melocotón en San José de Maipo.
En la acción judicial, la mujer señala que nunca ha sido consultada sobre la gestión de las propiedades ni ha recibido dinero, por ejemplo, de sus arriendos.
Jacqueline Pinochet asegura que “tomó conocimiento de que en virtud del referido contrato se realizaron una serie de actos de disposición respecto de una gran cantidad de bienes muebles e inmuebles pertenecientes a la sucesión, pero que para la verificación de los cuales jamás compareció y de los que nunca se ha rendido cuenta de ninguna naturaleza“.
Sumado a lo anterior, la hija menor del clan asegura sobre su hermano Marco Antonio que “el querellado desplegó una serie de actos violentos con el solo objeto de aislar del grupo familiar a mi representada y finalmente evitar a toda costa cualquier posibilidad de que esta pudiese tener acceso a los bienes que componen la comunidad hereditaria como a los frutos provenientes de los actos de disposición realizados por el querellado, provocando graves perjuicios patrimoniales a esta como serios daños emocionales a la misma”.
“El querellado no ha escatimado esfuerzos durante todos estos años en desplegar actos de diversa índole con el solo objeto de privar a mi representada de cualquier relación con el núcleo familiar”, se añade de igual forma.
En esa misma línea, acusa que “desde el año 2019 a la fecha el querellado ha negado acceso a mi representada al interior de la hacienda familiar ubicada en la comuna de Santo Domingo, loteo ubicado en el sector de Los Boldos de la señalada comuna, lugar en el cual se ubican varias cabañas y una capilla en la cual se encuentran los restos de los padres de mi representada, a la que desde la señalada fecha se le ha negado acceso, mediante amenazas y referencias a órdenes directas del querellado a los cuidadores del lugar con objeto de privar cualquier acercamiento al lugar, coartando de forma arbitraria la posibilidad de visitar los restos mortales de sus padres”.