Estudiantes del Instituto Nacional ratificarían el lunes el acuerdo de no rendir el Simce. De ser así, se sumaría al Líceo Alessandri, quien ya confirmó que no rendirá la prueba. La próxima semana también decidirán el Líceo 7 y el Carmela Carvajal si adoptan esta postura.
Francisco Saba, vicepresidente del centro de alumnos del Instituto Nacional, señaló que, al contrario como indican los políticos, la educación municipal no es buena, y que los liceos emblemáticos son “una excepción a la regla.”
Sebastián Izquierdo, secretario ejecutivo de la Agencia de Calidad de la educación, sostuvo que estos liceos serán “grandes perdedores”, ya que no tendrán los resultados que otorga el Simce como instrumento de medición. Sin embargo, destacó que son casos aislados, resaltando a los más de 2.800 establecimientos que rendirán la prueba con normalidad.
La prueba del Simce fue creada durante el año 1988 por académicos de la Universidad Católica, entre los cuales estaba Erika Himmel, Premio Nacional de Educación el 2011, quien no apoya el boicot, pero sí critica el mal uso que se le da al examen.
Las posturas están divididas, ya que, mientras unos apuntan que la prueba no motiva a las escuelas a mejorar, otros resaltan que la prueba es un reflejo de las habilidades y destrezas que tienen los estudiantes.
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