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El director de Libertad y Desarrollo, Luis Larraín, criticó los principios del gobierno, a través de una columna en un medio de comunicación planteando principalmente que el gobierno traiciona sus principios “al arrebatar banderas socialistas y levantarlas en contra del empresariado”.
Estas declaraciones tuvieron una rápida respuesta por parte de Pablo Longueira, ministro de Economía, quien señaló que "los institutos cumplen un rol y aquellos que tenemos responsabilidad política, cumplimos otro".
Tras la columna de Larraín, surgió la respuesta del vocero Andrés Chadwick. "Se pueden tener posturas que pueden ser muy respetables sobre la base de ciertas ideologías, pero cuando llega el momento de gobernar y uno tiene que enfrentarse a los problemas reales uno tiene que pensar siempre que por sobre una ideología está el bienestar de cada persona", manifestó el ministro.
La contra respuesta de Larraín se hizo presente en una carta, asegurando que "no he pretendido que en la defensa de esos principios, el Estado renuncie a cumplir labores fiscalizadoras que eviten discriminaciones arbitrarias o abusos”. El analista afirmó que este hecho se efectúe "por quienes corresponde, de acuerdo a un estado de derecho, sin pretender obtener dividendos".
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